El Tribunal de Apelaciones rechaza el recurso de los padres de Terri Schiavo
A los progenitores de la mujer, en estado vegetativo irreversible, sólo les queda ya recurrir al Supremo
Terri Schiavo, la mujer estadounidense que lleva 15 años en estado vegetativo irreversible y que fue desconectada de la máquina que la alimenta el pasado viernes por orden de un juez de Florida, seguirá sin recibir nutrientes. Un tribunal de apelaciones ha rechazado el recurso de los padres de Schiavo para que le sean reimplantados los tubos de alimentación, decisión a la que también se negó ayer un juez federal. Horas después, el pleno de esta corte de justicia denegaba reabrir el caso.
Tras varios años de batalla legal e intervenciones del Gobierno de Florida, un juez de este Estado ordenó el pasado viernes la retirada de la sonda que mantiene con vida a Terri. Fue entonces cuando se puso en marcha la maquinaria gubernamental encabezada por el presidente George W. Bush. Los republicanos aprovecharon su mayoría en las dos Cámaras del Congreso para sacar adelante una ley ad hoc que permitiera la intervención de los tribunales federales en el caso. Era lo que los padres necesitaban para presentar ante un juez federal un recurso que paralizara la decisión del juez de Florida del viernes y se volviera a conectar a Terri a la sonda.
Sin embargo, este juez federal, James Whittemore, denegó la reinserción de las sondas, alegando que la vida de Terri y sus intereses habían sido "adecuadamente protegidos por los juzgados" de Florida. Nada más conocer la decisión de Whittemore, los padres acudieron al Tribunal de Apelaciones de Atlanta, formado por tres jueces, que ha dictaminado lo mismo que Whittemore. Horas después, el pleno de esta corte—integrado por 12 jueces, siete de ellos nombrados por presidentes republicanos y cinco por demócratas— rechazaba reabrir el caso, según ha informado a las 21.30 —hora peninsular española— la agencia de noticias Reuters. A Bob y Mary Schindler, los padres de Terri, les queda un último cartucho, elevar un recurso ante el Tribunal Supremo. Pero el tiempo corre en su contra, pues su hija lleva seis días sin alimentos y no aguantará mucho más.
Dos de los jueces del Tribunal de Apelación del 11º Circuito, Ed Carnes y Frank Hull, han reconocido la "absoluta tragedia que ha caído sobre la señora Schiavo", pero coinciden con los argumentos del juez Whittemore en que "los demandantes [los padres] no han demostrado un caso sustancial en ninguna de sus demandas. También concluimos que el tribunal de distrito sopesó cuidadosamente su decisión de que denegar el alivio temporal [la reconexión de Terri a la sonda] en estas circunstancias no es un abuso de su discreción".
La opinión de Carnes y Hull es mayoritaria frente a la del juez Charles Wilson, que disiente de sus colegas y ha emitido un voto discrepante en el que sostiene que "la muerte de Theresa (Terri) Schiavo, que es inminente, acaba de hecho con el litigio sin una oportunidad justa de considerar totalmente el fondo de las demandas constitucionales de los demandantes".
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