Los obispos consideran que los homosexuales "no tienen derecho" a casarse
La Conferencia Episcopal entiende que permitir las uniones entre personas del mismo sexo es "injusto y erróneo"
La Conferencia Episcopal Española considera "erróneo e injusto" que los homosexuales tengan derecho a casarse y disfrutar de los mismos derechos que los matrimonios entre hombre y mujer. Los obispos han emitido un comunicado, al término de la reunión del Consejo de Ministros que ha aprobado el proyecto de ley que permite los matrimonios entre parejas del mismo sexo, en el que estima que "a la convivencia de homosexuales no se le puede reconocer una dimensión social semejante a la del matrimonio y a la de familia" tradicionales. Es más, afirman que a los homosexuales "no les asiste el derecho a contraer matrimonio".
Nada más terminar la reunión semanal del Gobierno, la Conferencia Episcopal ha emitido una nota en la que critica con dureza la iniciativa. En primer lugar, califica de "errónea e injusta" la propuesta aprobada por el Gobierno de Zapatero para equiparar al matrimonio la unión de personas del mismo sexo. En opinión de los obispos, el matrimonio, "engendrando y educando a sus hijos, contribuye de manera insustituible al crecimiento y estabilidad de la sociedad", por lo que "le es debido el reconocimiento y el apoyo legal del Estado". Por el contrario, "a la convivencia de homosexuales, que no puede tener nunca esas características, no se le puede reconocer una dimensión social semejante a la del matrimonio y a la de familia".
Para los obispos "el matrimonio es una institución", y como tal debe ser "tutelada y promovida por las leyes". Aunque reconocen que "las personas homosexuales no deben ser discriminadas en sus derechos ciudadanos", entienden que el matrimonio es una "institución esencialmente heterosexual, es decir, que no puede ser contraído más que por personas de diverso sexo: una mujer y un varón. A dos personas del mismo sexo no les asiste ningún derecho a contraer matrimonio entre ellas".
Por tanto, opina la Conferencia Episcopal que "el Estado, por su parte, no puede reconocer este derecho inexistente, a no ser actuando de un modo arbitrario que excede sus capacidades y que dañará, sin duda muy seriamente, el bien común" y que "la medida propuesta tendrá consecuencias negativas que afectarán a toda la sociedad". La razón para esta opinión es que "equiparar las uniones homosexuales a los verdaderos matrimonios es introducir un peligroso factor de disolución de la institución matrimonial y, con ella, del justo orden social".
En relación con el derecho a la adopción, el comunicado señala que "dos personas del mismo sexo, que pretenden suplantar a un matrimonio, no constituyen un referente adecuado para la adopción. La figura del padre y de la madre es fundamental para la neta identificación sexual de la persona. Ningún estudio ha puesto fehacientemente en cuestión estas evidencias". Así, si "esta legislación se llevara adelante, abandonaríamos la sabiduría humana y jurídica de toda la Humanidad".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.