Kofi Annan urge a los líderes mundiales a encabezar la lucha contra el sida
El secretario general de la ONU inaugura la XV Conferencia Internacional sobre esta pandemia
Miles de velas han titilado hoy en Bangkok mientras se apagaban los ecos de las palabras solemnes con las que se ha inaugurado la XV Conferencia Internacional sobre el Sida. Llamas vacilantes encendidas en honor a los casi cinco millones de infectados en 2003, a los casi tres millones de fallecidos ese año, a los millones de almas barridos por la pandemia.
Minutos antes, el secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, instaba una vez más a los jefes de Estado y de Gobierno de todo el mundo a liderar la lucha contra la enfermedad. Se calcula que, en la actualidad, entre 38 y 40 millones de personas están infectadas por el virus.
"No hacemos lo suficiente"
En Tailandia, donde tras más de una década en la que el sida ha sido un fantasma desterrado de las conversaciones, se ha conseguido reducir el número de nuevas infecciones desde las 150.000 anuales de 1991, cuando se pusieron en marcha los programas de prevención, hasta las 20.000 del año pasado. Allí, en Bangkok, se reunirán desde hoy y hasta el próximo sábado los más de 17.000 delegados de 160 países —funcionarios, políticos, investigadores, médicos miembros de asociaciones y enfermos— para tratar el estado de la cuestión bajo el lema "Acceso a la atención para todos".
Y es que, como reconocía en una entrevista con EL PAÍS el director del Programa de la ONU para el Sida, Peter Piot, "no estamos haciendo lo suficiente para hacer asequibles los tratamientos. En los países en desarrollo los necesitan seis millones de personas, la mayoría en África, y sólo llegan a 400.000".
El énfasis, en Asia
Para movilizar los recursos de los Estados industrializados e implicar a todos los sectores de la sociedad en la lucha contra la enfermedad, su jefe, Kofi Annan, ha pedido hoy a los gobernantes, "desde los Ministerios de Finanzas hasta los gobiernos locales, y desde los Ministerios de Educación hasta los de Defensa", que se encabecen la lucha para que los países más pobres tengan acceso también a los tratamientos y cócteles de antivirales (combinaciones de medicamentos). Eso sí, la Conferencia ha echado a andar sin la presencia de ningún jefe de Gobierno, a excepción del tailandés, Thaksin Shinawatra.
Annan ha destacado que Asia es el lugar más adecuado para celebrar esta conferencia porque es "en este continente donde el virus se propaga a un ritmo alarmante y donde se registró una de cada cuatro nuevas infecciones contraídas durante el último año", y donde la infección afecta a unos 7,4 millones de personas.
"El sida no sólo destroza millones de vidas, también será una carga para los sistemas sanitarios de la región, y atraerá los recursos económicos necesarios para el desarrollo económico y social de la región", había señalado Annan antes del inicio de la sesión inaugural.
20 millones de muertos
En un informe presentado el pasado jueves, el Programa de la ONU contra el Sida (ONUSIDA) indicó que más de 20 millones de personas de todo el mundo han muerto a causa del virus del sida desde que en 1981 se detectaron en Estados Unidos los primeros casos entre homosexuales.
En la actualidad, cerca de 38 millones de personas son portadoras del virus VIH, que lesiona el sistema inmunológico exponiendo el cuerpo a enfermedades, tales como el cáncer, la tuberculosis y la neumonía.
Los expertos pronostican que de continuar la misma tendencia, en el 2010 habrá cien millones de seres humanos infectados por el sida, y unos 25 millones de niños huérfanos.
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