El comité asesor de Sanidad apoya la selección de embriones para salvar a un hermano
La Comisión Nacional de Reproducción Humana Asistida deniega una petición pero asegura que propondrá un cambio legislativo para que sea viable
La Comisión Nacional de Reproducción Humana Asistida, órgano asesor del Ministerio de Sanidad, apoya la petición realizada por el Instituto Valenciano de Infertilidad para que cinco parejas puedan mediante pruebas genéticas que embrión se le implanta a la mujer para que el bebé que nazca pueda donar a su hermano enfermo las células que necesita para sobrevivir. Sin embargo, considera que "en este momento no es posible autorizar la solicitud", pues iría contra la Ley de Reproducción Asistida.
La legislación "impone limitaciones" para aprobar la petición del IVI sobre técnicas de selección genética con fines terapéuticos, pero la Comisión ha acordado volver a reunirse en la primera quincena de julio para elevar al Ministerio de Sanidad y Consumo una propuesta concreta que permita dar viabilidad jurídica a esta demanda, según se ha informado en una nota ministerial. Sanidad había manifestado ya su propósito de reformar la Ley de Reproducción Asistida en el plazo más breve posible.
Técnicamente, el proceso revisado hoy es posible (se ha hecho en el Reino Unido, aunque con la selección de embriones se realizó en EE UU) , pero no se ha realizado nunca en España. El IVI ha elevó la petición de cinco parejas que desean seleccionar la composición genética de sus futuros hijos, porque tienen ya uno que sufre una grave enfermedad de la sangre, y quieren que el siguiente sea compatible para que pueda salvar a su hermano mediante un trasplante de médula. Aunque la petición fue cursada el 26 de agosto de 2003, el anterior cuadro ministerial no hizo nada por resolverla.
Las cinco parejas quieren someterse a la misma técnica, el diagnóstico preimplantacional, o análisis genético de los embriones. Tres son portadoras de enfermedades hereditarias de la sangre (beta talasemia y anemia de Fanconi), tienen un hijo y desean tener otro, pero que nazca sano (algo que es posible y legal) y pueda además ser donante (de células de su cordón umblical) para repoblar la médula ósea de su hermano para curarle.
Las otras dos parejas también tienen hijos con enfermedades de la sangre, pero no hereditarias sino adquiridas, y desean tener otro hijo que sea compatible como donante de su hermano. Al no ser los padres portadores del mal, el único motivo para seleccionar el embrión sería el de hacerlo compatible con su hermano, pues el niño nacería (presumiblemente) sano. En este caso, no existe ningún precedente en todo el mundo. Además, la Ley de Reproducción Asistida (de 1988, modificada por el Partido Popular el año pasado) sólo permite manipular un embrión en su propio bien.
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