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Las autoridades rumanas ordenan separar a la 'princesa de los gitanos' de su marido

La orden prohíbe cohabitar a los dos esposos, de 12 y 15 años respectivamente, y les obliga a continuar sus estudios

La Dirección para la Protección de la Infancia en Rumanía decidió ayer separar a la princesa gitana Ana María, de 12 años, de su esposo Birita, de 15, después de que una investigación demostrara la ilegalidad del enlace. Las imágenes de la boda, celebrada el pasado sábado en la localidad de Sibiu, en la que podía verse a la novia resistirse a dar el sí, quiero, e incluso abandonar enfadada el templo, dieron la vuelta al mundo.

La orden prohíbe además cohabitar a los dos esposos y les obliga a continuar sus estudios. El padre de Ana María, Florin Cioaba, el Rey de los Gitanos, acusado por la prensa de haber obligado a su hija a casarse con Birita a cambio de 500 piezas de oro, una limusina y un apartamento, se ha mostrado "contento" por esta decisión.

"Esta decisión es, en todo caso, mejor que la propuesta de la relatora del Parlamento Europeo para Rumanía, Emma Nicholson, quien incluso mencionó la posibilidad de que ingresar a mi hija y a su marido a un centro para menores", ha declarado Cioaba a la prensa. La Comisión Europea lanzó serias advertencias a Rumanía, candidata al ingreso en la UE para 2007, por permitir el enlace y emplazó al Gobierno de Bucarest a rescatar a la joven.

Prueba médica

Ana María debía haberse sometido a una prueba médica el pasado miércoles para determinar si había mantenido relaciones sexuales, aunque la policía ha advertido de que la joven no puede ser obligada a pasar el test. En cualquier caso los asistentes a la boda fueron invitados a examinar la ropa de la cama donde los menores pasaron su noche de bodas para que constataran que estaba manchada con sangre de la joven, como prueba de que era virgen antes del enlace.

"Se supone que hubo sexo en la noche de bodas, pero fue por mutuo consentimiento", ha asegurado Anca Dragan, jefa de los servicios de protección a menores de Sibiu. Según Dragan, aparentemente Ana María está enamorada de su marido.

En Rumania la edad legal a partir de la cual pueden tener relaciones sexuales las chicas es de 15 años, aunque deben esperar a los 16 para casarse. Sin embargo, el matrimonio entre niños es muy común en el país, donde se calcula que están casados entre 500.000 y tres millones de menores.

La joven, de 12 años, en un programa de televisión junto a su padre y su marido.
La joven, de 12 años, en un programa de televisión junto a su padre y su marido.REUTERS

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