Detenido el abogado chileno que participó en la venta del bebé al matrimonio de invidentes
El letrado ya fue procesado en 1997 por una "adopcion irregular" y pasó tres meses en la cárcel por otro caso similar
Un juez ordenó ayer la detención del abogado chileno Alejandro López del Campo, implicado en la supuesta venta de un bebé a una pareja de invidentes españoles de las Islas Canarias que fueron encarcelados al intentar abandonar este país suramericano con el bebé, por el que presuntamente habían pagado 15.000 dólares.
El jurista, que estaba prófugo, se presentó voluntariamente a declarar ante la corte, pero fue inmediatamente encarcelado. Durante la tarde y gran parte de la noche, la policía le sometió a un careo con los invidentes y con la madre del menor, Juana Haydée Rebolledo, que también fue detenida por haber entregado a su hijo ilegalmente en adopción.
El abogado, según fuentes judiciales, cuenta con un amplio historial en casos similares. Fue procesado en 1997 por un caso de "adopcion irregular" en la ciudad de Achao, en el extremo sur de Chile, juicio que da cuenta con una amplia investigación en sus 1.400 páginas agrupadas en cinco tomos. Las mismas fuentes han señalado que el jurista estuvo detenido durante tres meses por otro caso similar.
La pareja denuncia un engaño
El complejo caso, que mantiene en alerta a la policía y a los tribunales chilenos y que ha tenido gran repercusión en España, se inició el lunes pasado, cuando Francisco Gil, de 49 años, y María Mateo Báez, de 42, fueron detenidos en el Aeropuerto Internacional de la capital chilena, cuando hacían trámites aduaneros para dejar Santiago con un bebé de tres meses al cual, según aseguraron, habían adoptado legalmente.
Sin embargo, al ser reconocidos por una mujer policía que recordó que la española había llegado a Chile el 1 de septiembre sin estar embarazada, se comprobó que los papeles que portaban señalaban que ellos eran los "padrinos" del menor y que su madre había autorizado que llevaran al niño a España. La pareja fue detenida de inmediato y permanece en la cárcel a la espera de la resolución judicial, que podría darse a conocer entre viernes y sábado de esta semana. Mediante su confesión ante el juez que investiga el caso, Eugenio Zamora, se pudo determinar que hace varios meses habían intentado adoptar a un lactante ante el sistema de protección al menor en Chile.
Sin embargo, las leyes de este país sudamericano permiten que extranjeros adopten niños mayores de un año. Tras esta frustrada gestión, contactaron con un chileno en España, ante quien hicieron un pago que se sumó a los 15.000 dólares que dieron en Santiago al recibir al bebé. No obstante, al tenor de las declaraciones del matrimonio de invidentes y del cónsul español en Santiago, Ricardo Peydró Conde, la pareja asegura que ha sufrido un engaño.
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