El elfo travieso de la Navidad: el nuevo fenómeno que divide a España
Esta tradición estadounidense se ha instalado con fuerza en nuestro país: las búsquedas en Google se han duplicado, los memes sobre el trabajo que da el elfo se enfrentan a los de sus trucos y el muñeco mueve un negocio millonario
Hace ya unos años que otra tradición navideña estadounidense comenzó a instalarse con fuerza en España. Se trata del elfo de la Navidad, un personaje ‘mágico’ que llega a las casa durante el mes de diciembre y hace travesuras durante la noche. Los niños se despiertan todas las mañanas emocionados por comprobar qué habrá hecho el elfo en esa ocasión. Según datos de Google Trends, se trata de una tradición que iba ganando peso Navidad tras Navidad durante los últimos cinco años, pero que en 2024 se convierte en fenómeno superando por mucho a las búsquedas de calendario de adviento, otra costumbre que lleva años consolidándose. ¿No teníamos suficiente con mantener la magia de Papá Noel y los Reyes Magos? ¿No tenían suficiente carga mental los padres de España para tener que idear cada noche una nueva travesura? Parece que no. Que tanto los mayores y , sobre todo, los niños tenían ganas de más.
Casi todos los padres consultados para este artículo, coinciden en estar cansados de pensar cada día una nueva travesura, pero al mismo tiempo aseguran que hacen el esfuerzo por la “ilusión de los niños”. En este contexto comienzan a ganar peso los influencers de los elfos. Es decir, esos perfiles de redes sociales que comparten con sus seguidores sus ideas traviesas para que los demás no tengan que pensar.
Cada vez que alguien se queja del hastío que le supone la convivencia con el elfo en un chat del colegio alguien responde. “Métete en el perfil de Roberto Leal para buscar trucos”. El presentador de programas de televisión como Pasapalabra o El desafío es padre de un niño y una niña y empezó a interesarse por el tema del elfo hace un par de navidades. “Esta tradición llegó a mi casa hace tres años, cuando amigos de mi hija mayor Lola comenzaron también a tener elfos. Esto es un trasiego porque incluye una responsabilidad. Está guay, pero tienes que hacerlo bien porque estás jugando con la ilusión de los niños. Y cuando digo bien no me refiero a a que te lo curres más o menos sino a cumplir con hacerlo cada noche porque a nosotros los primeros años a veces se nos olvidaba (...) Ahora mi mujer y yo estamos mejor organizados. Algunas ideas las hemos visto por ahí y otras son nuestras propias. Lo que tratamos es que sean cosas divertidos y que los niños encuentren que la trastada de hoy no tiene nada que ver con la de ayer. Yo la verdad que me lo estoy pasando muy bien, me divierto mucho. En cuanto se duermen lo preparamos y después disfruto con mi mujer de una serie, como en cualquier familia. Y cada mañana cuando se levantan lo grabo porque el día de mañana será un recuerdo precioso. Ojalá dure muchísimos años la inocencia de mis niños”, explica a S Moda.
Jessica López está detrás de la cuenta de Instagram mami_novata, donde ha publicado un video con una trastada que ha superado los 17 millones de visitas. “Yo creo que fui de las primeras en empezar a hacer contenido con el elfo. Otros años funcionaba, pero en 2024 es donde he visto un crecimiento alucinante tanto de seguidores como de visitas. Además de los vídeos que dan ideas de trastadas, funcionan muy bien los que muestran los que pasa cuando no has movido el elfo”. López asegura que todo empezó cuando una de las marcas que comercializa el juguete, CefaToys ,se puso en contacto con ella para colaborar. “Desde entonces llevo años haciéndolo porque veía la ilusión que les hacía a los niños, lo emocionados que se levantan”. Respecto al perfil de gente que acaba de empezar a seguirla cree algunos “llegan a mi perfil un poco perdidos y me preguntan: ‘Pero, ¿qué es esto del elfo?, ¿cómo ha llegado? y ¿cómo se va?’”. Ahora, junto a su marido, prepara el vídeo final para el día 24 en el que lo despedirán “con una canción de José Luis Perales”.
Un negocio millonario y una fuente de estrés
No todo el mundo tiene el buen humor y las ganas de jugar de Roberto Leal o Jessica López. Hay un perfil de padres que ven al elfo como una carga más que ojalá pudieran parar. Internet está plagado de memes sobre cómo el elfo afecta a la vida de aquellos que comparten todas las obligaciones de la vida adulta con la crianza de los niños. “Lo resumiría en éramos pocos y parió el elfo. Cómo añadir más estrés a nuestras miserables vidas diarias”, asegura Jorge (39 años), un padre que reniega de la llegada de la tradición a España, pero que cada noche acaba preparando una ‘travesura’ más. “Lo peor es cuando la niña nos dice que esa travesura ya la hizo el año pasado”, asegura entre risas. Como muchos otros padres han tirado de redes sociales para buscar ideas cuando se agota la inspiración. Lara (39 años), asegura que ha vivido momentos de tensión relacionados con el elfo. “El otro día me levanté a las 6:30 de la mañana a darle la toma a mi hijo pequeño, que tiene dos meses, y de repente me di cuenta de que no habíamos movido el maldito elfo… Estuve rezando los 20 minutos de la toma, para que la mayor, de cinco años, no se nos despertase en ese mismo momento. Me caían sudores fríos”.
María (43 años) tuvo claro que, aunque algunos niños de la clase tenían elfos, no iba a caer en esta ‘obligación’. “Llevaba dos años haciendo el calendario de adviento, que acabó convirtiéndose en un agobio, porque cada día le poníamos una pequeña cosita en la casilla correspondiente. Pero pensé: ‘¿qué sentido tiene comprarle chorradillas cuando ya ha escrito una carta a los Reyes con regalos que le hacen ilusión? Vamos a tratar también de evitar lo del elfo. Creo que al final estas cosas acaban añadiendo más estrés a unas fechas en las que ya tienes muchas cosas en las que pensar y, además, ellos están sobreexcitados”.
Con tono de humor, Laura Baena (43 años), de Malasmadres y la Asociación yo no renuncio, también se unió al club de los que no quieren elfos y publicó un video en redes diciendo: “Mis hijas tendrán una Navidad preciosa, pero que el elfo ese no aparecerá por aquí. ¿Voy a tener un elfo que luego voy a tener que limpiar yo las cosas que hace ese elfo por sorpresa?”, dice en el vídeo con tono cómico.
Al margen de aventurarse o no a meter el elfo en casa, lo que está claro es que estamos ante un fenómeno cultural, que, además, mueve mucho dinero. En este reportaje publicado en El Confidencial se estima que Lumistella, una de las marcas que comercializa los elfos, con base en Atlanta y cuya única línea de negocio son estos muñecos, está valorada en más de 100 millones de dólares. Pero hay que tener en cuenta que hay tantos elfos originales como copias más o menos logradas, por lo que el dinero que mueven estos personajes ‘mágicos’ es muchísimo mayor.
Un fenómeno cultural
Los aficionados a la moda se despertaban estos días con una de las producciones más peculiares de la historia de la edición estadounidense de Vogue. El elfo se convertía en el protagonista de un tema en el que aparece vestido de firmas como J.Crew o Thom Browne. “A falta de una semana para Navidad, llamamos a nuestros diminutos amigos del Polo Norte para que visitaran la sede de Vogue en el One World Trade Center y nos ayudaran con los preparativos de las fiestas. El único requisito era que se vistieran para impresionar a la versión de la moda de Santa Claus, Anna Wintour”, dicen en el artículo que acompaña las fotos.
Pero los elfos no solo se cuelan en las revistas de moda, también están en las plataformas audiovisuales. En Netflix, por ejemplo, existe una gran variedad de contenidos relacionados con ellos, como las películas An Elf’s Story: The Elf on the Shelf o Elf Pets: El rescate de los renos de Papá Noel. La influencia de estos ‘ayudantes’ va mucho más allá de las redes sociales, la moda y el cine. También son los protagonistas de diferentes campañas de publicidad. Todo parece indicar que nos hagan más ilusión o menos, los elfos han llegado para quedarse.
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