Loïc Prigent, el ojo que graba (y escribe) los trapos sucios de la moda

Los documentales  de moda tienen un antes y después, un punto de inflexión proyectado en  un nombre: Loïc Prigent.  Primero en Canal Plus Francia y luego en el canal franco-alemán Arte Prigent revoluciona el género documental  sobre el mundo de la moda con sus trabajos sobre Chanel, Marc Jacobs y  Louis Vuitton o el propio proceso de creación de una colección,  abriendo  una nueva vía expresiva en el género.

Loïc Prigent (Plouescat, 1973) un joven  periodista  se inicia en el mundo de la moda en el diario Liberation donde entra en contacto con las  bambalinas de los talleres de creación de  los diseñadores. De la experiencia en el periódico construirá su futuro ADN profesional. Hoy, a sus 43 años, sus trabajos documentales son celebrados por  los grandes popes del planeta moda contándose entre sus más fervientes admiradores la actriz Sarah Jessica Parker o  el mismísimo Karl Lagerfeld, con el que ha colaborado en varios documentales que han revelado el proceso creativo de uno de los grandes  protagonistas de la moda de la segunda mitad del siglo XX.

Una buena parte de esta experiencia en el mundo de la moda ha quedado reflejada en un libro, J’adore la mode mais c’est tout ce que je detéste (Adoro la moda aunque es todo lo que detesto, Grasset), contada desde su lado más caustico y efervescente: Los tweets que ha ido generando con motivo de las semanas de la moda y otros acontecimientos desde su puesto como testigo privilegiado.  “Amo la moda, por las mismas razones que la odio, por su superficialidad,  su ritmo vertiginoso, sus obsesiones”, declaraba Prigent con ocasión de la presentación del libro a propósito de su relación amor-odio con una industria y un sistema del que ha acabado  formando parte. Sus trabajos como asesor de moda o realizador de videos publicitarios para Chanel, L’Oreal,  Roger Vivier o Armani  lo han posicionado entre los creadores visuales más reclamados de la industria de la moda.

En 2011, el creador abría su cuenta de Twitter como proyección de su trabajo en la  moda. Sus comentarios rápidamente crean una legión de seguidores que a día de hoy cuentan con cerca de los 200.000 seguidores, junto con una cuenta de Instagram a punto de  alcanzar los 50.000 adheridos. Prigent, observador excepcional de esa  gran “comedia humana” que  representa el mundo de la moda,  realiza un coctel jugoso,  mezcla de humor y acidez, transcribiendo lo que pasa por sus ojos y sus oídos: “¿Su bronceado? Valentino, a su lado, parece blanco pálido”. “No llores. Piensa en tu maquillaje”. “Todo se ha convertido en muy chic. Estoy hambriento de vulgaridad”.

Algunos de esos diálogos sabrosos y punzantes parecen sacados los melodramas de Hollywood de los años cincuenta, en boca de Bette Davis o Joan Crawford. “Resulta tan enojoso como el color turquesa en una boda”. Una cualidad literaria que ha puesto en tela de juicio la  propia veracidad de los tweets. Prigent se ha defendido, declarando que todos son reales, aunque ha procurado dejar en el anonimato a sus autores.

Antes de su desembarco triunfal en  las redes sociales, Prigent había sentado cátedra en el mundo audiovisual con sus documentales, un ojo curioso, ‘la mirada Prigent’,  que conseguía salvar todos los obstáculos introduciéndose en las coulisses o las  bambalinas de la moda. Entre sus series más celebradas, El día antes (Le Jour d’avant, 2009) donde recoge las horas previas al desfile de una serie de diseñadores. Su serie documental sobre la casa Chanel, Signé Chanel (Canal Arte, 2004)  desmenuza el proceso de creación como si se tratara de un entomólogo aterrizando en el mundo de la moda.

Con una visión crítica que no renuncia a la  mirada o proyección de su lado más exuberante o voluptuoso, Prigent ha sabido captar y al mismo tiempo desmenuzar los nervios mutantes  de la moda, sus sueños y sus neurosis. Este verano el Canal Arte, en ese matrimonio creativo que desde hace años sostienen el realizador y la cadena de televisión, exhibía su último trabajo,  Scandales de la mode, una serie que revelaba algunos de los capítulos más transgresores de la moda y sus creadores. Ahora, a la espera de próximos proyectos, Prigent se divierte con la presentación de sus tweets literarios protagonizados por  estilistas, redactores, maquilladores, attaches de presse, peluqueros, fotógrafos, etc. que  ha ido almacenando, con paciencia y humor, desde esas últimas  filas donde acostumbra a sentarse en  los desfiles.

https://youtu.be/T5iFI1Boik0

Coincidiendo con la salida del libro, el canal Arte proyectará a finales de septiembre una mini-serie con la actriz Catherine Deneuve dando voz y acento- suponemos con bastante humor- a los tweets de la publicación. Como condición a su traslado a la pantalla Prigent había puesto el requisito  que fuera la actriz la recitadora de los textos. A la vista de los clips de promoción  de la serie, el encuentro Deneuve-Prigent, promete ser uno de los dúos más  afinados –y afilados– para  este inicio de temporada.