La española que fue ‘la chica más guapa del mundo’ para Prince
Hablamos con Paz Gómez, que hace 22 años fue escogida entre miles de candidatas para participar en el videoclip del fallecido artista. «Tenía muchísimo sentido del humor», recuerda.
A Paz Gómez la noticia de la muerte de Prince le ha pillado dando de cenar a su hija. «¡Pero si era muy joven!», nos espeta con tristeza al otro lado del teléfono. En 1994, ella fue ‘la chica más guapa del mundo’ para el artista y cambió su vida, aunque todavía se sorprende de que «los españoles recuerden tanto que yo salí en uno de sus videoclips». Porque Paz Gómez fue una de las elegidas para participar en el clip de su sencillo The most beautiful girl in the world, ese tema que editó en 1995 con el álbum The Gold Experience y que Warner Bros (discográfica del artista) ‘permitió’ que publicase como sencillo meses antes bajo el alias de The Symbol, editado por NPG Records y Edel Music. Aunque la canción estaba dedicada a su prometida, la puertorriqueña Mayte García, en el videoclip aparecen multitud de mujeres que encarnan la belleza femenina y para representarla, una de las elegidas fue una española. Ella. Todo un bombazo que la generación de treintañeros y cuarentones de este país recuerda con cariño por cómo nos lo vendió la televisión y prensa de la época: ¡Una española en un videoclip de Prince! ¡Qué internacionales somos!
Para Paz todo empezó en las navidades de 1993, cuando era una camarera y maquilladora y oyó en la radio que Prince buscaba chicas para colaboraciones artísticas: «Busco a la mujer más bella del mundo», rezaba el anuncio por palabras que Prince publicó en EEUU. Ella se animó y mandó unas fotos a la Cadena 40, que organizaba el concurso desde España. Pocos meses después la llamaron, quedó finalista entre 20 chicas (de entre otros tantos miles de candidatas) y viajó a Minessota, donde consiguió quedar entre otras cuatro finalistas. Un plan nada desdeñable para una madrileña con los 18 años recién cumplidos. «Nunca lo viví como algo especialmente extraordinario, era muy joven y supongo que hasta que no ha pasado el tiempo no he podido analizar con profundidad lo que realmente significó».
En las distancias cortas, Paz Gómez asegura que Prince era un hombre «con muchísimo sentido del humor» y «muy controlador» respecto a todo lo que rodeaba a su creatividad. «Era plenamente consciente de la imagen que proyectaba, de su excentricidad y de cómo debía enfocarse su carrera artística». Ella, que en aquel momento «no era muy fan» del artista, comprobó lo que suponía trabajar con una estrella a escala planetaria. «Tenía seguidores realmente apasionados», apunta. «Vi el fenómeno de cerca, pero yo nunca me sentí intimidada por él porque no era una mitómana», destaca. De los cuatro encuentros que tuvo con Prince, Gómez recuerda con cariño cuando cenó en su casa de Pasley Park. «Comimos una sopa de macarrones con verduras», recuerda. «Al rato de estar cenando se marchó a su estudio y luego me recogió un coche. Me dijeron que posiblemente se había marchado porque le gustaba observar a la gente que trabajaba con él. Era un persona que quería controlar todos sus movimientos artísticos», recalca. De los cuatro viajes que realizó para trabajar con el artista, Gómez asegura que Prince tenía un gran talante y que «estaba empeñado en que visitase uno de sus clubs en Minessota, pero yo era menor de edad en EEUU y no pudo ser».
Para el videoclip Paz grabó algunos tomas en las que aparecía jugando con margaritas y en bikini. «También hicimos varias sesiones de fotografía con su equipo, y por alguno de los cajones de casa deben andar las polaroids que traje de recuerdo», dice. ¿Y el videoclip? «También lo tengo por aquí, en alguno de los VHS, pero es que ¡hace tantos años de esto!», apunta. Tras su aventura al otro lado del atlántico, Gómez se centró en sus estudios de interpretación. Presentó programas de televisión (Clip, Clap, vídeo, en TVE) para después sumarse al reparto de Al salir de clase y aparecer en películas como Las razones de mis amigos, Amor, curiosidad, prozac y dudas; Intacto o Sin noticias de Dios. Tras pasar por series como Hospital Central, Gómez se centró en la dirección. Pero hoy, 22 años después de convertirse en ‘la chica más guapa del mundo’ para Prince, Paz le quita hierro al asunto, insiste en sorprenderse porque «todavía me recordéis por aquello» y nos tiene que colgar para enfrascarse en su más inmediata tarea: «Terminar de dar la cena y bañar a mi hija».
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