Taylor Swift sorprende al elegir un vestido de 68 euros de una pequeña marca para cenar con Blake Lively

Una quedada de amigas para cenar puede convertirse en noticia, siempre que Taylor Swift sea uno de los comensales. Esta semana la cantante, de 34 años, fue a cenar con la actriz Blake Lively (Serena van der Woodsen en Gossip Girl) al restaurante Lucali Pizza de Brooklyn, del chef Mark Iacono, uno de los locales de moda en Nueva York, donde famosos y vecinos del barrio se reúnen para probar sus afamadas pizzas. Para la cita nocturna con una de sus mejores amigas, Swift lució un vestido corto de terciopelo verde que pronto llamó la atención de sus seguidores. La cantante y compositora —que suma una fortuna valorada en 1.100 millones de dólares, lo que la convierte en la quinta mujer más poderosa del mundo, según recogía El País en este artículo— es además una auténtica prescriptora de moda. Si unas noches antes de la cena había brillado en la gala de los Globos de Oro —estaba nominada al galardón por el logro en taquilla de su documental Taylor Swift: The Eras Tour— con un ajustado vestido verde de lentejuelas de Gucci y joyas de De Beers, para su cena en Brooklyn mantuvo el mismo color, pero eligió una firma muy alejada de las de lujo que suele lucir. Su minivestido es de Little Lies, una pequeña marca escocesa que notó de inmediato el efecto Swift: la prenda, que vale 58 libras (68 euros) se agotó en su página web, pero ya se está reponiendo y se puede reservar, ahora en dos colores, verde y negro.

“Estamos abrumados por la respuesta que ha habido hasta ahora”, aseguraban sus propietarios en un vídeo compartido en TikTok, en el que anunciaban que ya están creando nuevas existencias. Little Lies se define en su página web como “un negocio familiar independiente fundado por el matrimonio formado por Jade y Stuar Robertsont”. La marca comenzó su andadura en 2015, en el apartamento de sus propietarios en Perth (ciudad del centro de Escocia), y el mundo de la música y las subculturas siempre ha sido una de sus principales fuentes de inspiración. De hecho, muchos de sus modelos emanan un estilo setentero y podrían haber formado parte del vestuario de series como Todos quieren a Daisy Jones. Algunos de los nombres de sus prendas evocan el mundo musical de esa época: en su página web se pueden ver una camiseta llamada Fleetwood Mac, un modelo llamado Hendrix y el vestido elegido por Swift se llama Sweet Jane, como la canción de 1970 de The Velvet Underground, escrita por Lou Reed.

Jade Robertson, cofundadora de la firma escocesa, reconoció en unas declaraciones al diario británico The Times que se había quedado “atónita” cuando descubrió que la famosísima artista había elegido una de sus prendas. “No teníamos ni idea ni siquiera de que tenía el vestido”, explicó. Lo descubrió gracias a su hermano, un swiftie que la avisó de madrugada con la noticia. Pronto, las redes sociales de la marca y su página web demostraron el que esa salida a cenar en Brooklyn había sido la mejor campaña publicitaria para la pequeña firma familiar.

“Lo ha llevado de una forma muy a lo Stevie Nicks”, aseguró Robertson a The Times. La cantante de Fleetwood Mac fue uno de los grandes iconos del estilo bohemio que definió los setenta, y para la propietaria de la marca Swift se ha inspirado en ella al combinar el vestido con unas altas botas de mosquetero de piel con grabados de serpientes que recuerdan a tatuajes. En contraste con el precio asequible del vestido de Little Lies, las botas sí que forman parte de las marcas de lujo a las que suele recurrir la artista: son de la edición limitada de Jimmy Choo x Jean Paul Gaultier y se pueden adquirir en la web de la firma de zapatos por 2.450 dólares (2.230 euros).

Muchos seguidores de la cantante han querido interpretar este estilismo como una nueva pista sobre el que prevén inminente lanzamiento de su versión de su álbum Reputation, de 2017 (desde 2010, después de que el fondo de inversión Shamrock Holdings adquiriera los derechos de sus seis primeros álbumes por un valor estimado de más de 250 millones de euros, la artista está regrabando y volviendo a publicar sus trabajos, bajo la etiqueta Taylor’s Version), dado que el color verde y la simbología de las serpientes están muy relacionados con esa época.

De momento, además de salir con sus amigas; ir a premios como los Globos de Oro con reencuentros y chismes incluidos junto a Selena Gomez; asistir a los partidos de la NFL para animar a su novio, la estrella de los Kansas City Chiefs Travis Kelce, y dejar mensajes ocultos sobre sus posibles próximos lanzamientos, Swift también ha sabido aprovechar su influencia estilística para dar un impulso a una firma de moda poco conocida. “Somos una pequeña empresa y trabajamos arduamente para reabastecerlos lo antes posible. ¡Las actualizaciones sobre el envío y el seguimiento de pedidos se enviarán por correo electrónico!”, advierte Little Lies en la descripción de su modelo Sweet Jane. Puede ser el empujón que la firma necesitaba para seguir evolucionando, porque en su web ellos mismos reconocen que desde 2023 han experimentado un crecimiento importante y desean seguir en esa línea: “Con una fuerte imagen de marca y seguidores casi de culto, Little Lies ha crecido exponencialmente y ha roto el techo del modelo de negocio original, allanando el camino para avanzar en una nueva dirección: la dirección soñada”.