María Simún: la diseñadora de 24 años que viste a Rosalía y a sus bailarinas

El pasado miércoles Rosalía paralizaba Madrid con un concierto gratuito en plena plaza de Colón. La cantante subía al escenario enfundada en volantes imaginados por Palomo Spain; sus bailarinas, en monos con transparencias de María Simún. “Hago ropa pero no me atrae el mundo de la moda. Creo que todo lo que se hace hoy en pasarela es demasiado obvio”, explica la creativa a S Moda. Hija del músico Enrique Urquijo, es epítome de una nueva horda de creativos españoles que quieren sacar los pies del encorsetado tiesto de la industria. La moda se le queda corta, “no expresas al 100%”, y prefiere trabajar mano a mano con artistas: Bad Gyal, La Zowi o La Mala Rodríguez. “Mujeres que me inspiran con su arte”, dice.

Prácticamente desconocida entre el gran público, la madrileña de solo 24 años es también una de las diseñadoras de cabecera de Rosalía. Se conocieron cuando ambas estaban empezando. “Fue a través de Instagram, antes incluso de que presentara su primer trabajo”, recuerda. Enamorada de la garra de la catalana se plantó en su primer concierto. De allí salió una amistad y una colaboración que se materializó en el vestuario para la gira del disco Los Ángeles y se ratificó en la última edición de los Grammy Latinos. Rosalía lució un vestido plata, de manga larga e inspiración oriental, que le hizo su amiga. “Aquello fue un reto porque ella quería algo súper específico, muy brillante, y yo normalmente diseño cosas mucho más minimalistas”. El resultado gustó a ambas: “Quiero transmitir fuerza y que lo que vista me represente (…). María es amiga mía y de mi hermana, y compartimos el proceso de diseño con ella, fue capaz de desarrollar un vestido lleno de luz y poder”, confesaba poco después Rosalía a esta revista.

Para el concierto de la noche del 31 buscaron otra imagen potente. “Había hecho los trajes de coristas y palmeros en su concierto del Sónar, pero para esta vez quería algo que no fuera pantalón y parte de arriba. Que tuviera rollo chandalero, pero dándole un punto más flamenco con acabados y volantes”.

Precoz y despierta, estudió fotografía e ilustración. “No creo que la creatividad se pueda enseñar. A crear se aprende observando o investigando”. En su currículum presume ya de la concepción de varias firmas: Flighters, “una marca de concepto en la que vendemos sudaderas. Concretamente el modelo con capucha que siempre llevo cuando vuelo y que, según descubrí en Instagram, es también el uniforme para muchos viajeros”. Antes, con solo 18 años, la marca de básicos Airam Sacul, junto Lucas Sirera (hijo de la diseñadora Sybilla). ¿Lo último? Simun Basics, la enseña que actualmente compagina con sus colaboraciones con el mundo de la música. “Es una pequeña colección con lo que yo considero que son los básicos de ahora. Las prendas que buscaba pero no encontraba en el mercado”, dice la productiva creadora que promete dar mucho que hablar.