Melody: “Como Carmen Sevilla, soy inocente y sexy”

Hace años, en un Cine de barrio, antes de que la enfermedad la retirara de la vida pública, Carmen Sevilla le dijo a Melody: “Si en algún momento hacen una película sobre mí, quiero que tú me interpretes”. El deseo de la artista más querida de España, que acaba de cumplir 88 años, se convirtió en realidad gracias a Paco León y su serie Arde Madrid: “Yo estaba grabando en Miami cuando me llamó. Me dijo que no iba a encontrar a nadie que se pareciera más a Carmen que yo”. Melody tiene, además, la experiencia de haber pasado por Tu cara me suena en 2013, y sin duda esto era más sencillo que imitar a Thalía (“me oyen, me escuchan”) cantando Arrasando: “¡No sabes lo mal que lo pasé para aprenderme la letra! ¡Esa canción es un trabalenguas!”. Para prepararse, dado que hace una década que Carmen está malita, recurrió a vídeos de YouTube. Su gran momento llega en el cuarto episodio. Con un collar de impresión, un vestido de gala, un moño y dando palmas, Melody se transforma en Carmen durante la juerga posterior al bautizo de Antoñito Flores, el hijo de la gran Lola (interpretada aquí por Mariola Fuentes).

“Carmen y yo somos las dos sevillanas, y eso es algo que nos ayuda, porque nos entendemos a la hora de hablar, a la hora de expresarnos, en el movimiento corporal…”. Cantantes y actrices, ambas empezaron pronto, muy pronto, y han sobrevivido a su precocidad, en un caso insólito en el mundo del espectáculo. Carmen dio sus primeros zapateados como bailarina de Estrellita Castro con 12 años; Melody, como ahijada artística de El Fary con 10. A Carmen le llevó 30 años reinventarse como mito erótico durante El Destape; Melody ha podido vivir su sexualidad y su cuerpo con mucha más naturalidad: con una mantilla y transparencias, casi como si fuera una mezcla de Dolores de Cospedal en Semana Santa con la Madonna de la época Like a Virgin, Melody se presentó en la fiesta del que (aseguran) ha sido uno de los saraos del año, el preestreno de la serie. Lo bueno llegó al acabar la proyección, en el Florida. Tan metida en su papel de Carmen estaba Melody que tuvo que hacer lo que mejor se les da a las dos: “Yo canté hace años Cariño trianero en un homenaje a Carmen. Aquí canté Typical Spanish. Carmen ha hecho muchos temas con este pellizco sexy y picarón, que ella tenía, aunque a la vez era muy inocente. Tenía algo muy, muy bonito, un brillo muy especial”. Su energía sorprendió a los asistentes: “No soy una persona muy fiestera, pero cuando salgo a un show soy muy extrovertida, me gusta bailar. Creo que en eso me parezco también a Carmen: aunque tenga mi punto pícaro soy cortá, aunque haya gente que no se lo cree”. La verdad es que viendo el vídeo, que se hizo viral, cualquiera lo diría. “Soy súper casera, en serio. Quien me conoce lo sabe. Soy súper tranquila”.

De ahí deben venir sus dotes culinarias, a las que sacó partido en este 2018 en Ven a cenar conmigo. Ese salmorejo que ha rebautizado –echándole, ejem, un poco de morro– como “Tradición andaluza” y su salmón “De Noruega al Guadalquivir”. “No sabes cuánta gente me para por la calle para decirme cómo les ha gustado el plato que he hecho. ¡Le puse mucho cariño y empeño!

El paralelismo más obvio entre las dos estrellas es el animal, claro. Si Carmen Sevilla tenía sus ovejitas, Melody tuvo a sus gorilas, aquellos por los que tenía a “todo el mundo tocando palmas” y moviendo “las manos hacia arriba, las manos hacia abajo”.

Ahora los ha sustituido por unos papagayos en el videoclip Parapapá. Un single veraniego al que pronto seguirá Rúmbame. “Un tema espectacular. Un temazo que sale a finales de enero. Una canción con mucho gancho, muy rítmica, llena de energía y de pasión. Es para empezar el año con fuerza”. La va a necesitar: en su mente está sacar otros cinco singles y un disco en 2019. Además de volver a la televisión como Carmen Sevilla en la segunda temporada de Arde Madrid con Paco León, aunque no quiera confirmarlo.