La mujer que sobrevivió a Chris Brown es la revelación televisiva del momento

Pocos han conseguido saltar de la prensa del cotilleo a la sección de cultura de los periódicos. Siempre que en el libro de familia no figure un apellido ilustre, el trayecto tradicional es justo el opuesto: alguien destaca en un terreno artístico y automáticamente su vida personal adquiere dimensión pública. Cuando en TMZ –la web estrella del cotilleo sensacionalista– hay más de un centenar de artículos que te referencian, llegar a las glamurosas páginas de Variety no es tarea fácil. Por eso la historia de esta californiana de 30 años es digna de reseña. Desde hace más de un lustro, Karrueche Tran es toda una celebridad del papel cuché estadounidense debido a su relación con el cantante Chris Brown, que terminó con una orden de alejamiento contra él por amenazas. Hoy, Tran es calificada como la gran “revelación” de la ficción televisiva gracias a la aclamada serie Claws (disponible en HBO España) y como “el ejemplo a seguir por las supervivientes”, por todas las mujeres inmersas en relaciones abusivas. “La industria no creía en mí. Ha sido duro romper las barreras”, asegura. Su trabajo ahora habla por ella.

La reinvención de Karrueche Tran da comienzo hace poco más de un año, en junio de 2017, con dos hechos sucedidos en la misma semana. En el apartado profesional, debutó como actriz televisiva en la aplaudida Claws. Da vida a Virginia, una exstripper y la más joven del grupo de mujeres que trabajan en un salón de manicura del sur de Florida, un negocio utilizado por un clan mafioso para blanquear dinero. La ficción, que acaba de estrenar su segunda temporada, combina costumbrismo y humor negro, exhibiendo una confesa influencia del tono almodovariano de Mujeres al borde de un ataque de nervios. Las ganadoras del Emmy Niecy Nash (Reno 911!) y Carrie Preston (The Good Wife) encabezan el reparto de una serie producida por Rashida Jones, hija del mítico productor musical Quincy Jones, y conocida por sus roles en sitcoms como The Office o Parks and Recreation.

Pocos días después de su estreno en la pequeña pantalla, Tran conseguía que se dictara una orden de alejamiento durante cinco años contra su expareja, el cantante Chris Brown. Desde su ruptura en 2015, el intérprete de éxitos como With You o Forever le había enviado mensajes violentos en los que aseguraba que “haría su vida un infierno” y amenazaba con “matarla” o “acosar a sus amigos”. Según la revista People, durante sus seis años de relación interrumpida Tran confesó haber sido golpeada en el estómago por su expareja y empujada por las escaleras. “Mi pasado es el que es. No puedo huir de él, no puedo borrarlo. Solo puedo crecer desde aquí. Ahora soy mucho mejor que antes, estoy más segura de mí misma. Desafortunadamente tuve que pasar por esas situaciones, pero no cambiaría nada, porque no sería quien soy si no hubiera pasado antes por ese periodo en mi vida”, declaró la intérprete en la web Salon.

Chris Brown cuenta con una fama bien ganada de celebridad tóxica desde que en la noche del 8 de febrero de 2009, horas antes de la gala de entrega de los premios Grammy, propinara una brutal paliza a su pareja por aquel entonces, la estrella del pop Rihanna. Las imágenes de las lesiones conmocionaron a la opinión pública y Brown se declaró culpable de la agresión, evitando la cárcel a cambio de cinco años en libertad condicional y una (otra) orden de alejamiento. En aquella época, además de pequeños pinitos como modelo, Karrueche Tran trabajaba como personal shopper en uno de los grandes almacenes de lujo de la cadena Nordstrom en California. Su buen hacer la llevaría a posicionarse como estilista de varias estrellas de Hollywood, conociendo a Brown en uno de esos trabajos. En 2011 comenzaría el romance con uno de los hombres más odiados de Estados Unidos, una relación repleta de polémicas y transformada después en un triangulo amoroso después de que Rihanna perdonara a su expareja. La ruptura tuvo lugar tras conocerse que el cantante tenía una hija secreta de nueve meses con otra mujer.

La reinvención personal de la californiana sirve ahora de inspiración a otras supervivientes y, en los tiempos del #MeToo, su historia es uno de los ejemplos más mediáticos de que es posible salir reforzada de una relación abusiva. “Hay luz al final del túnel. Si puedo transmitir ese mensaje a la gente, me quedo con eso”, dijo en The Daily Beast. Firmó un contrato con la agencia de modelos Wilhelmina pero su cara, familiar en los tabloides durante años, le cerró durante meses las puertas de las audiciones en Hollywood. “Había una pequeña voz en mi cabeza que me decía, ‘No te rindas, llora un poco si quieres, pero sé paciente y trabaja más duro”. Poco tiempo después, interrumpía sus vacaciones en Mikonos para acudir al casting de Claws y conseguía su rol más reconocido hasta el momento. Otras dos películas estrenadas este año confirman que Tran ha llegado a la industria del cine para quedarse.

El actual momento dulce de la actriz no termina en el ámbito profesional, también ha rehecho su vida amorosa con el jugador de fútbol americano Victor Cruz, receptor estrella de los New York Giants durante varios años. Cruz comparte con Tran su pasión por el mundo de la moda. Además de ser considerado uno de los deportistas mejor vestidos del mundo, es un habitual del front row, amigo personal de Anna Wintour e imagen de una colección de Riccardo Tisci para Givenchy en 2015. Junto a la actriz conforma una de las parejas más envidiadas actualmente del prensa rosa. Unas páginas a las que ha vuelto Tran tres años después. Esta vez, respetando el trayecto tradicional.