Jada Pinkett: “Las mujeres debemos conocer nuestra propia identidad sexual»

Firme. Así suena su voz al otro lado del teléfono. Ese tono imperativo es el mismo que utiliza en Magic Mike XXL, que se estrena el próximo día 10, para incitar a Channing Tatum y Joe Manganiello a quitarse la ropa. La película habla de strippers masculinos y a la vez, sostiene la actriz de Baltimore (Maryland), es un canto al empoderamiento de la mujer. Feminista convencida, Jada Pinkett Smith se pronuncia con seguridad sobre sexo, política o derechos humanos, pero se muestra más reservada al hablar de su familia. Lleva 18 años casada con Will Smith, y sus hijos Jaden y Willow (17 y 14 años) forman parte de la nueva generación de adolescentes cool: él actúa, canta, baila y es famoso por sus arriesgados estilismos; ella comparte sus inclinaciones artísticas, ha sido el fichaje más joven de la discográfica de Jay Z y es la nueva imagen de Marc Jacobs. Todo lo han aprendido en casa. «Es verdad ese viejo dicho de que tus hijos no hacen lo que les dices, sino lo que haces», subraya la matriarca. En su caso ocurrió algo parecido. «Mi familia está llena de artistas visuales, pero actuar siempre fue mi pasión. Comencé muy joven y fui afortunada por tener gente alrededor que me apoyó. Mi primer papel fue el de la malvada bruja del Oeste en El mago de Oz. Desde entonces, me picó el gusanillo de la interpretación», relata. Luego llegaron las series y las películas. Productora, actriz de doblaje, filántropa y cantante, anuncia que en el futuro trabajará más. «Mis hijos ya son mayores y me encuentro inspirada para actuar de nuevo. Definitivamente, se me va a ver mucho más que en los últimos años», avisa.

Ha vuelto a la televisión con 'Gotham', una serie que revisa la infancia de Batman. Su personaje, Fish Mooney, que no sale en los cómics, es vital para la trama. ¿Estará en la segunda temporada?

Puede que vuelva… No lo sé. Habrá que esperar para conocer su destino. Hacer este papel fue un sueño hecho realidad para la geek de los cómics que soy.

Fish Mooney y Rome, a quien encarna en 'Magic Mike XXL', son mujeres de armas tomar y ambas dirigen clubes nocturnos…

Pero en realidad son muy diferentes. Fish es despiadada, intenta hacerse con el poder en la ciudad. Rome posee un club de adultos porque cree que el erotismo es una forma de aumentar la autoestima.

Vestido de cóctel de Versace y zapatos con estampado de pitón de Jimmy Choo.

Don Flood

¿Cómo es posible conseguir realizar una labor de empoderamiento femenino en un club de ‘striptease’ masculino?

Rome piensa que para que una mujer se sienta completa debe estar realizada sexualmente. No cree que pueda estar completa sin tener una vida sexual saludable.

¿Y usted lo cree?

Comparto ese punto de vista, sí.

¿También que las mujeres, hoy en día, están conectadas a su sexualidad?

Pienso que se nos pone un montón de obstáculos para que así sea. Se nos habla constantemente sobre nuestros cuerpos, sobre cómo tenemos que responder y mirar al sexo. Hay que abrir puertas a las féminas para que de forma cómoda y segura descubran su propia identidad sexual.

Channing Tatum, Joe Manganiello, Matt Bomer… Comparte pantalla con algunos de los actores más deseados. Y esta vez son ellos los que van ligeros de ropa.

Fueron muy respetuosos, y a la vez muy abiertos, y utilizaron su buena energía masculina para que todo fuera bien.

¿Su marido no sintió celos al verla tan bien rodeada?

En absoluto. No sé si ha visto a mi esposo últimamente, pero ahora mismo es uno de los hombres más sexy de Hollywood, así que no tiene nada de lo que preocuparse.

Body de Mugler, botas altas de Pretty Ballerinas y pendientes de Daniel Espinosa.

Don Flood

¿Por qué cree que cuesta tanto hablar públicamente sobre sexo?

Porque todavía hay quien lo asocia a algo sucio… Eso significa que esas personas no tienen una relación sana. Me he dado cuenta de que el sexo no es el problema, sino cómo pensamos sobre él. Cuanto más hablemos y lo exploremos, desarrollaremos una mejor relación con las prácticas sexuales. Es un tema con muchas capas y matices, y creo que no nos damos tiempo o espacio para explorarlo porque lo vemos como algo polémico.

¿En esa comunicación de la que habla reside el secreto para tener una relación de pareja satisfactoria?

No puedo hablar por todo el mundo, pero considero que la sexualidad es otra forma de comunicarse, para expresar cómo se siente uno mismo y cómo lo hace hacia los demás. Sí, creo que puede ser un componente poderoso en una relación.

¿Cómo se las arregló para controlar a todos los 'machos alfa' de la película?

No pretendía controlarlos. Mi personaje sabe que todo el mundo merece que se ame su belleza personal, por eso ellos se sienten cómodos.

Pero usted sí está acostumbrada a mandar en la industria del cine. ¿Es difícil ser una mujer poderosa en Hollywood?

Tal y como lo percibo ahora, no lo es demasiado. Cuanto más mayor me hago, mejor me siento en mi propia piel. Me acepto con todo lo que eso implica, y cuando comienzas a asumirlo, no ves las cosas difíciles, sino tal y como son. No creo que sea más complicado que cualquier otra profesión. La vida tiene sus obstáculos, seas profesora, abogada o periodista. Más que decir que es difícil, diría que conlleva una serie de retos, pero estos siempre me han ayudado a seguir creciendo. Me siento honrada por poder hacer lo que me gusta. Lo recalco porque sé que la mayoría de la gente no tiene esa oportunidad, y ser consciente de ello hace que supere cualquier dificultad.

Wicked Wisdom, su grupo de ‘rock metal’, ¿es su vía de escape del mundillo del cine?

Sí, con la música expreso mi parte salvaje. Es una cara completamente distinta. Resulta importante para mantenerme en orden y sentirme completa. Una de las cosas vitales para formar parte del juego de Hollywood es encontrar maneras de conservar el equilibrio: te puede gustar cantar, construir casas, los coches, pintar…

Vestido de Balmain y pendientes de oro amarillo y amatista de Gold & Roses.

Don Flood

Para Jada, ser rompedora es una necesidad. Incluso sobre la alfombra roja: «Me gusta transmitir cosas distintas con lo que llevo puesto. A veces, cuando quiero desaparecer, visto algo sencillo, relajado. En otras ocasiones busco ir contracorriente, me encanta esa faceta, sobre todo con mi pelo». Dice que ha heredado ese espíritu de su abuela, Marion Banfield: «Ella es mi inspiración. Fue una agitadora, una mujer sin miedos que tuvo una vida fuera de lo convencional, y las semillas que dejó en mí me han dado la fuerza para vivir como he decidido».

Apostó por educar a sus hijos en casa. ¿Ha sido importante para que desarrollen su potencial?

Ellos me dicen todo el tiempo que son así porque han imitado a sus padres. Pero nacieron artistas, no es algo que les hayamos enseñado, sino que lo han visto y vivido en casa. En realidad, cada uno de ellos posee talentos naturales que han decidido expandir.

Willow, pese a su juventud, es una joven muy feminista…

Mi hija y mi hijo, los dos, son pro mujeres. Creo que eso está muy relacionado con ver a un padre que lo es y a una madre que apoya el feminismo.

También lucha contra el tráfico de seres humanos con la organización Don’t Sell Bodies. ¿Por qué cree que sigue existiendo esa forma de esclavitud?

Porque la humanidad aún no ha conectado con la idea de los derechos humanos. Las mujeres, los niños, los hombres… merecen, todos, los mismos derechos. Pero seguimos luchando contra esa idea porque continúa habiendo países que creen que las mujeres son menos que los hombres, existen sociedades que no defienden el respeto a la infancia, y hay gente que mira a otros como simples objetos. Mientras esto no se supere, mientras no haya respeto por igual para todo el mundo, seas quien seas y tengas la profesión que tengas, esto, desgraciadamente, no cambiará.

Cuando Hillary Clinton anunció que se lanzaba a la carrera presidencial, usted afirmó que se sentía "más confusa y ansiosa que excitada". ¿Se ha hecho ya a la idea de tener una presidenta?

Sería increíble, porque reflejaría que de verdad estamos preparados para romper grandes estereotipos. El hecho de que hayamos tenido a un hombre negro en ese cargo, y que justo después saliera elegida una mujer, sería una muestra increíble de cómo estamos tratando de avanzar y de cómo nuestras mentes han evolucionado y cambiado. Un símbolo maravilloso y progresista.

Minivestido de Mugler, zapatos de Giuseppe Zanotti y pendientes de Sara Lasry.

Don Flood

En el cine se critica ahora el 'ageism', la discriminación de las mujeres por cuestión de edad, ¿ha experimentado usted ese rechazo?

Mi experiencia no ha sido que Hollywood no quiera que yo actúe, sino que me pide cosas diferentes a las que solía hacer, porque ya no soy una jovencita. Y eso es obvio, ¿no? Por eso no sabría decir si el problema es de la industria o de la transición personal de las mujeres que no aceptan que, a cierta edad, han de interpretar otro tipo de papeles. Hay que tener claro el punto de la vida en el que nos encontramos. Que seamos mujeres maduras no significa que ya no seamos bellas o que no exista un lugar para nosotras, porque lo hay. Pero es otro lugar.

¿Se siente bien superados los 40?

Definitivamente, me veo y siento más bella que a los 20. Creo que mi marido me ama más y que su amor es más profundo. Tiene mucho que ver con el hecho de que he comprendido que la belleza no solo abarca el físico, por fin he conectado conmigo misma. Esa es una de las cosas que adoro de Europa. En Italia he visto a mujeres jóvenes y mayores acaparando la misma atención, su secreto reside en ser conscientes de su atractivo personal. El físico es una gran baza, pero realmente es conforme envejecemos cuando la belleza interior comienza a florecer.

¿Y cómo se ve dentro de 20 años?

Con un poco de suerte seré como mi madre. La verdad es que siempre he imaginado que cuando sea mayor viviré en una isla o en el campo, por ejemplo en Italia. Me veo en un futuro disfrutando de la vida de una forma más tranquila y placentera que ahora.