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4 cosas que deberías saber de Jenny Slate

Si no se te derrite el corazón con su personaje Marcel the shell, no eres humano.

cover jenny slate
Instagram/ @jennyslate

A muchos en 2013 quizá no les sonaba el nombre de Jenny Slate. Normal. Era una de esas secundarias infalibles que, pese a no acaparar la atención internacional y el poderío que desprenden otras jefas de la comedia como Tina Fey, Kristen Wiig o Amy Poehler, era esa actriz que siempre conseguía arrancar unas risas al verla pasar fugazmente por series como Hello Ladies, Girls o Bored to death. Quien no recuerde el nombre de Jenny Slate cuando acabe este 2014 tendrá un serio problema. Esta cómica, nieta de un superviviente del Holocausto (su apellido es una americanización de Slatkevich), es uno de los fenómenos del año. Algunos ya la señalan como candidata (muy rezagada en las listas) al Oscar de la Academia. Otros dicen que su segundo libro será como el primero y volverá a colarse en la lista de superventas del New York Times. Aquí va una guía de supervivencia para descubrir a la jefa del año:

1) Salió de esa cantera que es 'Saturday Night Live', pero solo duró un año y dicen que la despidieron por decir "joder" en antena

Slate participó en la temporada de 2009 a 2010. Compartió algún que otro sketch con Kristen Wiig y en el primer programa dijo sin querer "I fucking love you for that" (algo así como un 'joder, te quiero por eso'). No sabemos si fue por entonar lo que allí llaman "la bomba que empieza por F" lo que propició su despido. La leyenda negra dice que sí.


 

2) Su despido ayudó a crear el viral más tierno de la historia

A Slate le dijeron en junio que no seguiría en Saturday Night Live. Tal y como explicó a Conan O'Brien, con el bajón anímico que supuso saber que no continuaba, una noche de agosto empezó a poner una voz aniñada para tratar de echarse unas risas, estando en un motel con su marido, el cineasta Dan Fleischer-Camp y unos amigos. Ahí se gestó uno de los personajes más entrañables de Internet, Marcel the shell, una mini-concha con zapatillas que después se convirtiría en uno de los virales más emotivos y divertidos de la red. 24 millones de visitas lo avalan. ¿Quién no se derritiría ante este stop motion de una diminuta concha que dice que sus sombreros son las lentejas o que una vez mordisqueó un poco de queso y su colesterol se puso a 900? (Se puede ver con subtítulos, pero con menos calidad, aquí)

El éxito de su viral se convirtió en un libro infantil, Marcel the shell with Shoes On, que se coló en la lista de bestsellers del New York Times. Ahora han vuelto a la carga con The Most Surprised I've ever seen, un segundo libro que, cómo no, también ha venido acompañado de un vídeo encantador sobre las aventuras de Marcel the shell. Ya sabes: life is a party, rock your body.

3) ¿Seguro que no te suena? La has visto en 4 series este año

Además de poner la voz más entrañable de la historia, Slate ha asaltado el mundo televisivo y ha demostrado que para espectro de registros, el suyo. Fue la mujer algo asfixiante pero sensata de Guggenheim en House of Lies, interpretó a Mona Lisa, la hermana de Jean-Ralphio de Parks and Recreation, se dejó ver por la comedia favorita de los Globos de Oro, Brooklyn Nine-Nine y ahora ha vuelto con Married.

Slate en ‘Married’, ‘Parks and Recreation’, ‘House of Lies’ y ‘Brooklyn Nine-Nine’. Foto: Cordon Press

Cordon Press

4) Ha reinventado la 'rom com' (y ha demostrado que se puede abortar en una película)

Vale, ha pasado fugazmente por algunas series, pero donde realmente se luce, y donde demuestra que el stand up comedy no es solo territorio de hombres, es en Obvious Child (Gillian Robespierre,2014). Una película de la que no nos cansamos, ni nos cansaremos, de hablar. Primero le echamos el ojo cuando llegó a Sundance publicitada como la primera 'rom com' en la que una mujer puede abortar con final feliz. Después, ya vista, os la recomendamos por haber reinventado un género que languidecía con dosis de humor, ironía y realidad. La interpretación de Slate es una de las mejores del año. Nos sumamos a esa lista de tímidos críticos que exigen que, aunque salga de una cinta de bajo presupuesto, se merece una nominación al Oscar o al Globo de Oro. Ella lo vale.

El estilazo de Jenny Slate.

Corbis

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