Los Dj profesionales de las bodas: “Hay novios que creen que lo mejor es que elijan todas las canciones y eso es un error”

Este artículo es un extracto de ‘De Boda’, el boletín de ‘S Moda’ en primera persona sobre cómo se organiza un enlace. Si quieres recibirlo, puedes apuntarte gratis aquí.

Cuando hace unos días estaba a punto de ser 20 de enero, resonó en mi cabeza la mítica canción de La Oreja de Van Gogh que dice “la madrugada del 20 de enero saliendo del tren…”. Y pensé que esa es una de las canciones que no puede faltar en mi boda. Por ese detalle, esta entrega del boletín va sobre música, porque ninguna fiesta es tal sin ella y una boda, ante todo, es un fiestón.

Qué importancia va a tener la música en el gran día es una de las cosas que tienes que tener claro pronto porque tu presupuesto variará bastante. Por ejemplo, si optas por grupos en directo será más elevado que si un único Dj se encarga de todo el sonido (microfonar la ceremonia, música ambiente, fiesta…). Reconozco que para mí las bodas más divertidas a las que he ido han sido en las que había grupos en directo, creo que le dan un toquecillo festivalero que es imposible que no guste a la mayoría de amigos.

Para analizar este servicio he hablado con dos de los contactos mejor valorados en el portal Bodas.net (una Biblia para algunos novios). Carlos González, CEO de Prodjmadrid Events, Music & Dj’s, reconoce que hace una década la música era secundario para los novios: “Les importaba más que la finca fuese bonita, la comida de calidad… El Dj era un señor poniendo un gran hit detrás de otro, pero a nivel técnico y luces no miraban nada. Y de extras no había prácticamente nada”. Ahora los Dj son profesionales con más reconocimiento. “Algunos se ven como verdaderas rockstars, con una vida aspiracional más cercana a la de un futbolista que a la de un profesional tradicional. Aunque en el sector bodas aún nos quede mucho trabajo por hacer, este cambio de imagen ha ayudado a revalorizar el papel del DJ, transformándolo en una figura clave para los eventos sociales y culturales.Este cambio se traduce en la incorporación de profesionales con nombre y apellido que lideran eventos con tecnología punta, como si de un festival se tratase”, explica al otro lado del teléfono Javi Lavalle, Dj y fundador de la empresa White Lion.

Los dos profesionales están de acuerdo en que actualmente no vale solo con música, el Dj va acompañado de equipos técnicamente muy potentes, pantallas led, máquina de humo, confeti, tatuadores, otros músicos, como saxofonistas o violinistas… Y además, tienen un trabajo extra: suelen estar presentes en redes sociales porque esa es una vía muy importante para que los futuros novios conozcan su trabajo y se interesen por ellos.

Investigando sobre este tema descubrí un rol que nunca había escuchado: el wedding music planner. Carlos González explica que es un servicio de asesoramiento que ofrecen las empresas de entretenimiento como la suya y que sirve para conocer a los novios, lo que les gusta y lo que esperan de su boda para así ofrecerles un servicio a medida. “Hay novios que creen que lo mejor es que ellos elijan todo el playlist y eso es un error”, comenta, porque aunque a una pareja le guste mucho un tipo de música, él recomienda que se dejen guiar por los profesionales. Un aspecto en el que Javi Lavalle se para cuando habla de las primeras reuniones entre músicos y parejas es el feeling: “Para un Dj profesional no solo se trata de conocer los gustos musicales de los novios, sino también de establecer una conexión o feeling. Al fin y al cabo, trabajamos con emociones, y esa conexión es fundamental para entender lo que quieren transmitir en su día especial”.

Y hablando de emociones, estarás de acuerdo conmigo en que casi siempre en toda fiesta hay alguien muy insistente pidiendo canciones. O bien con un tema que le encanta a él o porque tiene una historia con los novios en la que aparece esa canción. Y ahí, ¿qué hace el Dj? ¿Tienen que tener en cuenta todas las peticiones? ¿Es de mala educación pedir canciones? Hice esta pregunta a los dos entrevistados porque a veces yo misma soy un poco pesada, sobre todo con una canción que le encanta a mis compañeras de equipo. Javi Lavalle cree que “no es conveniente ponerle puertas al campo” pero que las solicitudes hay que considerarlas como sugerencias, no como reglas. “Si una petición encaja con el momento, la energía de la pista y el estilo previamente definido con los novios, la incluyo sin problema. Sin embargo, si rompe la dinámica o no se alinea con el ambiente que estamos construyendo, prefiero explicarlo amablemente”, cuenta. El empresario bromea con los perfiles de invitados que suelen pedir canciones: “El insistente, que pide repetidamente una canción y cuando finalmente la pones, ¡está en el baño!; el indeciso, que quiere ‘algo más animado’, pero no sabe qué canción; el del móvil, que desde la pista insiste en mostrarte una canción en su teléfono; la supuesta prima de la novia, que te pide una canción súper hortera bajo coacción y cuando la pones ves a la novia frunciendo el ceño”.

Carlos González explica que los Dj tienen la mente abierta y ágil como para ir cambiando de música según el momento. Para él la fórmula ideal es que los novios le digan de 15 a 20 canciones imprescindibles y el resto es cosa del profesional: “Peticiones, sí, pero filtramos nosotros. Si de repente estamos en una parte de musicote y piden una sevillana… Las peticiones tienen que cuadrar con el momento”.