Cinco hechos que hicieron de Rocío Dúrcal la leyenda que es hoy

1. Cómo pasó niña a mujer

Con su debut en la pantalla como estrella juvenil el cine español alcanzaba su Everest en la promoción de ídolos a medio camino entre los calcetines escolares y las primeras medias de nylon. Rocío Dúrcal buscó nuevos horizontes y confirmó su estatus de intérprete escénica debutando en el teatro con la obra Un domingo en Nueva York a las órdenes de Adolfo Marsillach en una pieza que giraba sobre la pérdida de la virginidad y que en la pantalla había protagonizado Jane Fonda. La estrella infantil alcanzaba su mayoría de edad.

2. Cuando Rocío hizo ye-ye-ye

Francia podía presumir de sus cantantes ye-ye, Sylvie Vartan, France Gall o Françoise Hardy con sus peinados de Carita y vestidos de Courrèges. Inglaterra tenía a sus ídolos pop como Sandie Shaw y Lulu, y nosotros, para no ser menos, a nuestras chicas ye-ye. Rocío Dúrcal y Marisol fueron las encargadas de presentar en sociedad la minifalda, los jersey mini-pulls, las medias de colores, los traje-pantalón y otras piezas del escaparate de ese nuevo templo del consumo juvenil llamado boutique. Las canciones de Los Brincos y Juan y Junior sirvieron de banda sonora para anunciar que los tiempos estaban cambiando y las estrellas adolescentes acabaron convirtiéndose en las imágenes icónicas de ese cambio.

3. Cuestión de género

Como adelanto de futuras transgresiones, Rocío Dúrcal juega con la confusión sexual adoptando rol masculino en la película Más bonita que ninguna. El equívoco como era de esperar quedaría aclarado finalmente como mandaba el argumento pero la figura de Rocío Dúrcal mudando de género transgredía con las imágenes almibaradas y bastante estereotipadas de las estrellas juveniles de la época. Años después la actriz volverá a romper moldes, y de paso tabúes, interpretando una relación homosexual junto la actriz Barbara Rey en Me siento extraña.

4. Una artista completa

Primero como estrella juvenil y más tarde como actriz adulta Rocío Dúrcal le dio al cine musical español sus últimos momentos de esplendor con permiso de Raphael y de Sara Montiel. En la pantalla exhibe su fuerza y ductilidad cantando toda clase de géneros musicales, de la balada pop a la copla, del bolero a la revista musical. No hay estilo en el escenario que se le pueda resistir proyectándose como la intérprete más completa del espectáculo español.

5. De ídolo juvenil a diva musical

Desde sus primeros temas compuestos por Augusto Algueró hasta sus últimas grabaciones, Rocío Dúrcal trascendió con sus interpretaciones llenas de fuerza y sensibilidad un material musical que en otras cantantes hubiera pasado con más pena que gloria. Una cantante capaz de interpretar y expresar nuestras emociones y en cuya voz parecen cantar todos sin distinción de barreras sociales ni culturales. Como otras grandes divas musicales Rocío Dúrcal acabará formando parte de ese club restringido capaz de hacer llorar cantando las páginas del listín telefónico. La melodía de la felicidad que ha cautivado a varias generaciones.