07. Sony A9: Revolución profesional
Es la cámara sin espejo de ópticas intercambiables más potente y rápida. Y significa algo más para Sony: un enorme paso para acabar con el duopolio de Canon y Nikon en el segmento profesional
El proyecto para crear la serie Alpha de Sony nacía en junio de 2005 de un acuerdo con Konica Minolta para desarrollar una nueva línea de cámaras réflex digitales. Para Sony fue un paso de gigante que supuso su entrada en el mercado profesional, el principio de una revolución tecnológica que acabaría cambiando también el mercado.
Durante los siguientes siete años, Sony creció con rapidez. Se fue apartando de los diseños heredados de Konica Minolta y comenzó a crear su propia tecnología: la serie Alpha 7 trajo las primeras cámaras compactas de sistema que salieron al mercado con sensores de fotograma completo (full frame) y, a la vez, la prueba palpable de la apuesta de Sony por las cámaras sin espejo.
Era la respuesta de Sony a un cambio radical en un mercado en el que las cámaras compactas y las réflex con espejo parecían tener los días contados. Kenji Tanaka, máximo responsable de Sony en el Digital Imaging Business Group, lo explicaba con una claridad meridiana en una entrevista concedida a DP Review: “Para que las cámaras avancen, los fabricantes deben desarrollar tecnologías sin espejo”.
La experiencia adquirida permitió a la marca lanzar la Sony A9, un modelo que forma parte de esa evolución con la inclusión del primer sensor CMOS full frame apilado (de 24,2 megapíxeles). Es la cámara sin espejo de ópticas intercambiables más potente y rápida. Y significa algo más para Sony: un enorme paso para acabar con el duopolio de Canon y Nikon en el segmento profesional. •
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
