Sánchez prepara una batería de leyes con sus 22 ministros
“Este debe ser el Gobierno de los jóvenes, que son los excluidos, los paganos de la crisis”, le ha dicho el presidente a su Gobierno
Las próximas reuniones del Consejo de Ministros irán cargadas de proyectos de ley. Se abre un tiempo de “gran dinamismo legislativo”, en palabras de Pedro Sánchez, que este sábado reunió a sus 22 ministros en una jornada de trabajo informal. Todos expusieron sus agendas y el resultado fue una abultada batería de proyectos sociales, económicos y educativos. El diálogo sobre Cataluña con los independentistas se incluyó en la sesión.
Los 22 ministros de Pedro Sánchez propusieron el sábado al presidente del Gobierno los proyectos que llevarán a los próximos consejos y sus prioridades a más largo plazo. Este fue el objetivo que llevó al presidente a reunirlos en una jornada de trabajo informal fuera de Madrid, en Quintos de Mora, una finca propiedad del Estado en Los Yébenes (Toledo). “Este debe ser el Gobierno de los jóvenes, que son los excluidos, los paganos de la crisis”, les dijo el presidente. Hay mucho campo para las políticas sociales, sobre las que se explayó el vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, líder de Unidas Podemos. Según varios asistentes, hubo optimismo en una reunión en la que la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, expresó su convicción de que la economía española se mueve sobre “bases sólidas”. Y sobre esas bases quieren trabajar los ministros. Se dedicó un apartado a la cohesión territorial. Fue la ministra de Política Territorial, Carolina Darias, quien la abordó desde la perspectiva de la desigualdad entre comunidades autónomas.
Todos los ministros hablaron “con entusiasmo” de sus proyectos, según fuentes conocedoras de la reunión. La ministra de Educación, Isabel Celaá, desarrolló con énfasis la tesis del conocimiento como origen del avance de los ciudadanos y de la sociedad. El desarrollo de la ciencia será el que “pague las pensiones”, dijo el titular del área. Todos los ministros llegaron juntos en un autobús que salió de Moncloa de madrugada, a excepción de las ministras de Defensa y de Igualdad, Margarita Robles e Irene Montero, respectivamente, que lo hicieron en sus coches. La segunda se llevó a su hija pequeña y con ellas iba la secretaria de Estado de Igualdad, Ione Belarra. Por parte de Moncloa, estuvieron el jefe de Gabinete del presidente, Iván Redondo, el secretario general, Félix Bolaños, y el secretario de Estado de Comunicación, Miguel Ángel Oliver. Por los ministros de Unidas Podemos estuvieron Julio Rodríguez, jefe de Gabinete del vicepresidente Pablo Iglesias, y el responsable de Comunicación, Juanma del Olmo.
La reunión duró en total ocho horas, con una de receso para el almuerzo. La intención del presidente es repetir la experiencia (ya lo hizo en agosto de 2018) para propiciar la integración de los miembros de un Gobierno de dos partidos.
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