Sánchez: “El Estado no puede ceder a la exaltación”

El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha querido lanzar un mensaje de firmeza, sin dejar de recalcar la importancia de la proporcionalidad, respecto a las tensiones que se viven en Cataluña. Sánchez ha aprovechado su comparecencia tras el Consejo Europeo que ha concluido este viernes en Bruselas para dirigirse "a todos los catalanes y a la sociedad española" el día de la huelga general convocada por el independentismo en la comunidad. "El Estado no puede ceder al impulso de la exaltación", ha destacado ante la prensa. Pero todas sus advertencias han ido acompañadas de una apelación a la mesura. "La proporcionalidad es un signo de fortaleza del Estado de derecho", ha sintetizado, frente a las llamadas que realizan otros partidos a aplicar medidas más drásticas para contener los actos violentos en Cataluña.

Antes siquiera de recibir las preguntas de los periodistas, el jefe del Ejecutivo se ha referido a la situación catalana para avisar de que "no habrá impunidad respecto a lo ocurrido en los últimos días". Pese a volver a emplear con cierta ambigüedad la idea sugerida por el ministro del Interior de que todas las respuestas están sobre la mesa, Sánchez ha optado por poner el acento en la prudencia. Incluso se ha permitido mirar hacia el futuro con un atisbo de esperanza. "La crisis se va a superar y la tranquilidad se restaurará", ha vaticinado.

Consciente de que esa normalización aún queda lejos, el jefe del Ejecutivo se ha referido a la defensa del referéndum que ha hecho el president Quim Torra como salida a la crisis en Cataluña: "Lo que no se puede es repetir un camino que ha llenado de frustración y de fracaso la sociedad catalana". Tras recordar que existe una mayoría catalana contraria a la independencia, Sánchez ha instado a Torra "a gobernar para toda Cataluña, no solo a una parte cada vez más radical". El presidente ha acusado al dirigente catalán de "banalizar y frivolizar la violencia" de los últimos días.

Sánchez asistía este viernes a la segunda jornada del Consejo Europeo en la capital comunitaria. Los veintisiete jefes de Estado y de Gobierno de la UE (sin el Reino Unido) se han reunido después de llegar este jueves a un acuerdo con el primer ministro británico, Boris Johnson, para la retirada del Reino Unido de la Unión Europea. España mantiene su derecho de veto sobre Gibraltar para pactos futuros, aunque el presidente ha evitado avanzar en su comparecencia qué exigirá el Gobierno a cambio de que el Peñón entre en la esfera de esos acuerdos. Esa herramienta consagrada en el pacto de salida da al Ejecutivo español la última palabra a la hora de incluir a la colonia británica en los acuerdos futuros de la UE. La cumbre se ha celebrado también el día que han entrado en vigor los aranceles de Estados Unidos a los productos agrícolas europeos.