El Gobierno suprime la Secretaría de Juan Carlos I
El órgano se creó tras su abdicación en 2014 para apoyar sus actividades institucionales
El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes un real decreto por el que se suprime la Secretaría del rey Juan Carlos I, el órgano creado con motivo de su abdicación en 2014 para prestarle apoyo en sus actividades institucionales. "Dado que su majestad el rey don Juan Carlos ha decidido dejar los actos institucionales, desaparece el objeto por el que se creó esta unidad", ha explicado el Gobierno.
Juan Carlos I dejó las actividades institucionales el pasado día 2 de junio, después de que le comunicara mediante una carta a su hijo, el rey Felipe VI, su deseo de apartarse de la vida pública coincidiendo con el quinto aniversario de su abdicación. Aunque su participación en la agenda oficial de La Zarzuela no era intensa, sí tenía esporádicos actos representativos de carácter cultural y entregas de premios. Ese protagonismo se intensificó a lo largo del año pasado en una serie de iniciativas y actividades públicas coincidiendo con el 40º aniversario de la Constitución y su 80º cumpleaños. A pesar de haber dejado de ser el jefe del Estado y de sus problemas de movilidad, en estos cinco años ha protagonizado unos 120 actos, ha pronunciado 30 discursos y realizado nueve viajes oficiales, como la firma del Acuerdo de Paz entre el Gobierno de Colombia y las FARC, la inauguración del Canal de Panamá, los funerales de Fidel Castro o varias tomas de posesión de presidentes iberoamericanos.
El jefe de la Secretaría, Alfonso Sanz Portolés, dejará de desempeñar esta función, pero mantiene su vinculación a la Casa del Rey como consejero diplomático de Felipe VI que ya era. Portolés se incorporó a La Zarzuela en septiembre de 1993 como segundo jefe de Protocolo. En 2011 fue nombrado secretario general de la Casa del Rey, cargo en el que cesó tras la abdicación de Juan Carlos I.
Como miembro de la familia real, Juan Carlos I seguirá disponiendo del apoyo de los servicios generales de La Zarzuela. El rey emérito recibe cada año una asignación procedente de la partida que los Presupuestos Generales del Estado destinan a la Jefatura del Estado, que el Rey, según la Constitución, "distribuye libremente". En 2019 esa asignación anual asciende a 194.232 euros, lo mismo que el año anterior por tratarse de unos Presupuestos Generales prorrogados. Por su parte, la reina Sofía, que mantiene la actividad institucional, recibe 109.260 euros.
Respecto a si Juan Carlos I mantendrá a partir de ahora esa misma asignación u otra menor en calidad de rey emérito, fuentes de La Zarzuela han explicado que es una situación que se evaluará en el momento de abordar los próximos presupuestos de la Casa del Rey. Juan Carlos I también disponía en estos años de un despacho en el Palacio Real para el desarrollo de su actividad de representación institucional, donde recibía audiencias de colectivos profesionales, deportivos o sociales. La Casa del Rey tampoco ha considerado por ahora si seguirá manteniendo el despacho o lo trasladará a La Zarzuela. En cuanto a la supresión aprobada por el Consejo de Ministros este viernes, la Casa del Rey la ha considerado "una consecuencia lógica".
El pasado domingo, primer día sin responsabilidades oficiales, el rey Juan Carlos I presidió la tradicional corrida de San Fernando, en Aranjuez, que rendía homenaje a su madre, María de las Mercedes de Borbón. Unos 9.000 aficionados lo recibieron en la plaza con un prolongado aplauso. Previamente, había celebrado un almuerzo privado con familiares, como su hermana Pilar de Borbón y la infanta Elena, y algunos amigos. Fue su primera aparición en público desde que el pasado 27 de mayo la Casa del Rey anunciara en un comunicado su voluntad de dejar la actividad institucional.
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