Ramón Espinar se une a las críticas internas contra la gestión de Iglesias
Podemos convoca para este sábado el consejo ciudadano estatal, máximo órgano entre asambleas, en el que analizará la situación del partido tras el descalabro electoral
Ramón Espinar, ex secretario general de Podemos en Madrid, ha sido el último en unirse a la lista de dirigentes que desde el pasado 26 de mayo responsabilizan a Pablo Iglesias del desplome en las cuatro últimas citas electorales. Apartado de la política desde el pasado enero cuando dimitió tras la integración de Íñigo Errejón en la plataforma de Manuela Carmena, Espinar reclama en una tribuna en eldiario.es que el partido del que formó parte desde sus inicios reflexione en una asamblea ciudadana. Es decir, el que fuera un dirigente próximo a Iglesias apunta ahora a la necesidad de que se adelante Vistalegre III, el congreso previsto para 2021 en el que Podemos tendrá que elegir un nuevo liderazgo. La dirección de Podemos evita, por el momento, contestar al que aún es militante de la formación y se remite al consejo ciudadano estatal del próximo sábado para analizar la situación por la que pasa el partido.
"Su intención es clara, pero desde la dirección estamos en otro asunto. Si algo hemos aprendido es que hablar de nosotros mismos en los medios no nos ha hecho nada bien", ha dicho este lunes por la mañana Noelia Vera, diputada y miembro de la dirección de Podemos. La dirigente ejemplifica la estrategia que seguirá a partir de ahora su formación: centrarse en la negociación de un Gobierno de coalición con el PSOE y tratar de reducir el ruido que desde las últimas elecciones se ha generado en el interior del partido. El sábado, en el consejo ciudadano, máximo órgano entre asambleas, Iglesias ofrecerá su posición, ante la que se replegará el núcleo duro del partido que le rodea.
Un día después de que se publicara la tribuna, Espinar ha aclarado en La Sexta que no ha pedido la dimisión de la cúpula de Podemos. "En todo caso es un ajuste de cuentas conmigo mismo", ha asegurado. Y ha descartado que pretenda liderar "una alternativa" a Iglesias. Aunque en su reflexión impugna la gestión del secretario general. “Podemos se ha roto en pedazos”, escribe el que fuera responsable en Madrid. “Mantiene sus siglas, pero no conserva a buena parte de sus dirigentes más destacados”, dice en referencia a su salida, la de Errejón y Carolina Bescansa, entre otros miembros destacados. Considera que la dirección actual no es capaz de analizar las razones de la crisis en la que considera está inmersa Podemos y que se ha agudizado tras perder más de un millón de votos en las pasadas generales. “Es incuestionable que, en los dos últimos años, Podemos ha perdido capacidad de integrar diferencia en su estructura”, analiza.
Espinar considera que la actual dirección —sin nombrar a Iglesias o a otros miembros destacados— recurre a las excusas para analizar la situación por la que atraviesa el partido. El exdirigente reclama un examen más profundo de la sociedad para que pueda traducirse en políticas concretas.
El politólogo acusa además a Podemos de contribuir a “una política de bloques” y sitúa la responsabilidad del partido al mismo nivel de la que le otorga al PP. “No está claro qué consigue Podemos alentando un imaginario que convierte a los independentistas en parte del bloque progresista y al espacio del cambio en un actor subordinado al PSOE”, se plantea. Es en este punto de su disertación cuando critica el objetivo de Iglesias de intentar formar un Gobierno de coalición liderado por Pedro Sánchez. De esta manera, Espinar se une a la corriente anticapitalista liderada por Teresa Rodríguez en Andalucía, aunque el dirigente siempre discrepó de los postulados de esta familia política integrada en Podemos. La delegación andaluza aboga por un acuerdo de programa que permita al partido controlar al Ejecutivo desde la oposición, el modelo que se aplica en Portugal.
“Supone una catástrofe estratégica”, asegura. “Podemos pasaría de representar una irrupción popular a consolidarse como una élite política a la izquierda”, prosigue. “Cuando eres parte del bloque, asumes la dinámica del bloque con lealtad”, escribe para argumentar que esta decisión de la dirección de Podemos les inhabilita para conseguir derogar la reforma laboral, una de las promesas que Iglesias hizo en campaña.
Para finalizar su reflexión, Espinar, usando la primera persona del plural, concluye que Podemos ha fracasado como “herramienta política de representación de un país nuevo” y reclama que se adelante la celebración de la asamblea ciudadana para que se elija un nuevo secretario general.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.