Podemos propone crear una unidad contra la corrupción institucional

Podemos afina sus propuestas contra la corrupción. El secretario general, Pablo Iglesias, ha propuesto este martes la creación una unidad "de élite, integral" contra la corrupción institucional para investigar las malas prácticas de los poderes públicos. La iniciativa coincide con una sucesión de episodios de espionaje al partido que se conocen estos días y que presuntamente obedecieron a órdenes políticas destinadas a debilitar a sus dirigentes. "No es grave porque ataquen a Podemos, sino porque atacan a la democracia española", ha argumentado el dirigente de la formación en un mitin celebrado en Zaragoza.

La unidad, compuesta por “los mejores cuadros de la policía, la Guardia Civil y las policías autonómicas”, según describe el partido, no dependerá del Ministerio del Interior, sino que solo rendirá cuentas ante jueces y Fiscalía. Sus miembros no podrán recibir ningún tipo de represalias —tampoco premios— por parte de los poderes públicos. Su coordinación la asumirán miembros de los cuerpos policiales “elegidos por concurso de méritos y capacidades”, una evaluación que realizará el Consejo General del Poder Judicial.

Empleando la fórmula que vertebra todo su programa electoral, Iglesias ha apelado a la Constitución para defender el anclaje de esta medida. En concreto, al artículo 126, que establece que la policía depende de jueces y ministerio fiscal en sus funciones de averiguación de delitos. "Vamos a combatir las cloacas del Estado con la Constitución en la mano", ha enfatizado.

Con esta iniciativa, que no figura en el programa, Podemos pretende dar respuesta a prácticas como las de la llamada policía patriótica, que empleó recursos de la seguridad del Estado con instrucciones políticas, según se desprende de las investigaciones en curso. Apoyándose en este hecho, el secretario de organización, Pablo Echenique, ha señalado en el mismo acto preelectoral que las elecciones del 26 de junio de 2016 "fueron amañadas" porque hubo intentos de desprestigiar con pruebas falsas a la formación política.

De manera más general, el programa de Podemos sí contempla un plan nacional contra la corrupción que promoverá una reforma del código penal para introducir como delito específico el enriquecimiento ilícito de cargos políticos que se beneficien de las prácticas corruptas, aunque no hayan participado directamente en ellas. También incluye un tipo agravado de prevaricación administrativa en las contrataciones públicas cuando se cometa a través de partidos. Para perseguir mejor esos delitos, se propone una ampliación de las plantillas de los cuerpos de seguridad del Estado dedicados a la lucha contra la corrupción y el blanqueo de capitales.

Al igual que en el caso de la unidad contra la corrupción institucional, Podemos aboga por sacar estos proyectos de la supervisión política al designar un organismo independiente para prevenir la corrupción, asesorar al poder judicial y asegurar protección a quien denuncie prácticas irregulares.