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España se acerca a Italia tras los choques en política migratoria

Borrell defiende forjar una postura común ante Bruselas con el Gobierno de Salvini

Lucía Abellán
El ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell (derecha), con su homologo italiano, Enzo Moavero, durante la rueda de prensa celebrada en el Palacio de Santa Cruz, en Madrid.
El ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell (derecha), con su homologo italiano, Enzo Moavero, durante la rueda de prensa celebrada en el Palacio de Santa Cruz, en Madrid.Luca Piergiovanni (EFE)

España se acerca a Italia tras los choques mantenidos en política migratoria. El ministro de Exteriores, Josep Borrell, se reunió este lunes con su homólogo italiano, Enzo Moavero, y acordaron forjar un frente común en Europa ante el desafío de la migración. Ambos responsables admitieron sus diferencias políticas, pero abogaron por enfatizar el aspecto que los hermana: tanto España como Italia son países de primera línea en las llegadas de migrantes por mar y defienden una mayor inversión en África para contener esos flujos.

“España no estuvo de acuerdo con el cierre de puertos que se produjo en Italia en verano. Dicho esto, Italia, Grecia y España están en la primera línea de los flujos migratorios y tenemos un interés común en que se conciba como una política europea, que haya un reparto de la carga”, argumentó Borrell en una conferencia de prensa conjunta ofrecida en el Ministerio de Exteriores tras el encuentro con Moavero.

Borrell se ha mostrado hasta ahora particularmente crítico con la línea dura promovida por el ministro italiano del Interior, Matteo Salvini, que en verano llegó a impedir el desembarco de migrantes en sus puertos (y uno de esos barcos rechazados, el Aquarius, acabó arribando a España). La cerrazón italiana se produce en el momento de mayor presión para España, que se ha convertido en la mayor puerta de entrada a Europa por el Mediterráneo. Mientras en las costas españolas desembarcaron 35.500 migrantes en los nueve primeros meses del año, a las italianas llegaron menos de 21.000, según datos de Frontex, la agencia europea de fronteras.

Pese a todo, Borrell considera que Madrid y Roma deben aliarse para facilitar el enconado debate migratorio en Bruselas. La UE no logra dar con la fórmula que combine la solidaridad necesaria con los países más presionados por las llegadas con la responsabilidad que los países del norte exigen a los que tienen frontera exterior comunitaria. “Tenemos discrepancias respecto a cómo Italia ha actuado, pero tenemos que buscar aproximaciones en los Consejos Europeos”, concluyó Borrell.

En una línea similar, el ministro italiano defendió la necesidad de estrechar los contactos con España. “Tengo un empeño en consultarnos de manera estrecha para tener una postura conjunta en el marco europeo”, argumentó. Está por ver si esa voluntad de acercamiento suaviza el inflamado discurso italiano respecto a las llegadas a sus puertos.

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Sobre la firma

Lucía Abellán
La redactora jefa de Internacional de EL PAÍS ha desarrollado casi toda su carrera profesional en este diario. Comenzó en 1999 en la sección de Economía, donde se especializó en mercado laboral y fiscalidad. Entre 2012 y 2018 fue corresponsal en Bruselas y posteriormente corresponsal diplomática adscrita a la sección de España.

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