Ciudadanos ve en Pablo Casado “más de los mismo, el viejo PP de siempre”
El presidente del Gobierno ha felicitado por teléfono al nuevo líder de la oposición y ambos han acordado fijar un próximo encuentro
La elección de Pablo Casado como presidente del PP ha suscitado reacciones inmediatas de todos los partidos. Ciudadanos, el principal competidor electoral de los populares, ha tachado al nuevo líder de “continuista”. “Estamos ante el PP de siempre, el viejo PP, el de la corrupción”, ha afirmado el secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha felicitado por teléfono al que a partir de ahora será el líder de la oposición y, en un breve diálogo, ambos han acordado fijar un próximo encuentro.
Ciudadanos guardó silencio durante la batalla interna en el PP, pero aguardaba con cierta expectación su desenlace. La crisis de los populares ha nutrido el crecimiento electoral del partido de Albert Rivera y el modo en que se resuelva puede influir directamente en su futuro. Tras conocerse la elección de Casado, Villegas ha evitado cualquier gesto de acercamiento y ha arremetido con dureza contra el vencedor recordando su pasado reciente como portavoz del PP. “Se trata de la persona que defendió públicamente a los corruptos”, ha atacado el secretario general de Ciudadanos. Albert Rivera ha adoptado una posición más institucional y, en un acto con jóvenes en Alicante, se ha limitado a dedicar a Casado una escueta felicitación en un tuit, en el que también daba la enhorabuena a los compromisarios que le eligieron.
Mejor acogida ha tenido Casado desde el lado más derechista del espectro político. El presidente de Vox, Santiago Abascal, antiguo miembro del PP, ha manifestado, también a través de Twitter, que si el nuevo líder popular cumple con lo prometido en su discurso, ambas formaciones tendrán “algunos puntos de encuentro”. Este posible acercamiento entre sus partidos se dejó ver durante la campaña, cuando Casado habló de “un PP al que pueda volver Ortega Lara”, el exfuncionario de prisiones secuestrado por ETA que militó en el partido hasta 2008 para después participar en la fundación de Vox. Abascal ha explicado que ese acercamiento puede concretarse “muy pronto” en los lugares donde el PP gobierna.
Pedro Sánchez ha hablado por teléfono con Casado unos minutos. Ambos se han emplazado a celebrar una reunión cuando sus agendas lo permitan. Antes, el jefe de Gobierno le había felicitado ya a través de su cuenta de Twitter, nada más conocerse la victoria del nuevo líder popular. En su mensaje a Casado, Sánchez, en todo caso, ha añadido: “El Gobierno seguirá trabajando por el crecimiento económico, el empleo digno, la conquista de los derechos y libertades y la reconstrucción del Estado de Bienestar”.
Ironía en la izquierda
Los ataques más cáusticos contra el recién elegido presidente del PP han llegado desde la izquierda y los nacionalistas catalanes. El secretario de Organización de Podemos, Pablo Echenique, ha tirado de ironía y ha trasladado su “pésame” a Albert Rivera y a los dirigentes de Vox. “Antes no teníamos ningún partido de extrema derecha pero ahora hay tres, dos grandes y uno pequeño”, ha afirmado en referencia al posible giro conservador del PP tras el triunfo de Casado, que ha expresado en numerosas ocasiones su deseo de unificar a toda la derecha española. Echenique también ha felicitado a los “fundamentalistas homófobos” del grupo ultracatólico Hazte Oír, que apoyó a Casado durante la campaña, y al expresidente José María Aznar, uno de los mentores del nuevo líder.
En el mismo tono irónico se han manifestado los diputados catalanes. Xavier Domènech, de En Comú Podem, ha dado la enhorabuena a Vox por su “fantástico candidato”. Gabriel Rufián y Joan Tardà, de ERC, han jugado en Twitter con las supuestas similitudes entre Casado y Albert Rivera, ambos de una misma generación. “Albert Casado i Pablo Rivera”, bromeó Tardà en Twitter.
