Debate sobre la cadena perpetua en medio de la conmoción
PP y Ciudadanos presentan enmiendas para endurecer las penas
"El mal existe y debe ser combatido con el Código Penal". Frases como esta llenan estos días las redes sociales tras el trágico asesinato del pequeño Gabriel Cruz, de ocho años, a manos de la pareja de su padre. Y en medio de esta conmoción social se debatirá mañana en el pleno del Congreso de los Diputados sobre la prisión permanente revisable. Lo que se someterá a votación no es si se deroga o no, sino si se aprueban las propuestas de endurecerla del Partido Popular y Ciudadanos.
El PNV presentó una proposición de ley en el Congreso para derogar la prisión permanente revisable en la línea del recurso de inconstitucionalidad planteado por el PSOE en 2015. Y, en la tramitación de la norma, el PP y Ciudadanos han presentado dos enmiendas a la totalidad que se votan mañana. Los populares quieren que se amplíen los supuestos a los que se aplica esta pena; la formación de Albert Rivera, que se endurezcan los requisitos para que los presos accedan a permisos penitenciarios y a la libertad condicional. Ninguno de los dos grupos tiene mayoría suficiente para aprobar sus enmiendas, así que previsiblemente serán rechazadas. A partir de ahí, la iniciativa legislativa seguirá su andadura: enmiendas al articulado, ponencia, votación, paso al Senado, etcétera.
La posición del PP está clara. La de Ciudadanos, no. Pactó con Pedro Sánchez la derogación inmediata de esta pena y mantuvo su rechazo a la misma con contundencia hasta que decidió pedir su endurecimiento a través de este trámite de enmiendas.
¿Qué pasa en Europa?
Hay prisión permanente revisable en países como Alemania, Italia, Francia, Bélgica, Holanda o Reino Unido. En Francia el preso puede pedir la libertad condicional a los 18 años como mínimo. En Alemania la revisión se produce como norma general a los 15 años, pudiendo alargarse en casos de especial gravedad. En Italia se puede pedir la revisión a los 26 años.
Pero en la mayoría de los países, el resto de las penas tienen una duración menor que en España, donde antes de la prisión permanente revisable había ya cumplimiento efectivo de 30 y 40 años de cárcel.
El hecho de que se debata días después del crimen de Gabriel Cruz incomoda a los que en principio se han posicionado a favor de la derogación (Podemos, PSOE, PNV, ERC...). "PP y Ciudadanos han hecho su cálculo y están usando de forma partidista este caso", cuestiona Margarita Robles, portavoz del PSOE en el Congreso. "Han ido retrasando este debate y pidiendo ampliación del plazo de enmiendas. Sin embargo, ahora, en medio de un crimen atroz, deciden que es el momento. No debería tratarse este tema en un momento de tanta carga emocional. Nosotros ya hemos dicho que no tendríamos problema en esperar a que el Constitucional se pronuncie".
Mientras tanto, el padre Diana Quer, la joven asesinada en Galicia en 2016, ha reunido ya más de tres millones de firmas en apoyo al endurecimiento de la prisión permanente revisable y pide a todos una reflexión, lo que ha llevado a Irene Montero, de Podemos, a proponer un referéndum vinculante sobre la cuestión.
La prisión permanente revisable, en vigor desde julio de 2015 para algunos delitos de especial gravedad, solo se ha aplicado una vez. Supone que el condenado solo puede recobrar la libertad si demuestra estar rehabilitado tras una serie de plazos (de al menos 25 años y de 28, 30 o 35 en algunos casos) y si previamente ha logrado acceder al tercer grado.
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