Cospedal defiende el artículo 155 ante militares españoles y extranjeros

El artículo 155 de la Constitución se ha convertido estos días en el perejil de todas las salsas y no hay tertulia política, charla de café o discurso que se resista a citarlo. La ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, no ha querido ser menos y ha aprovechado este martes la apertura del XXVII Seminario Internacional de la Cátedra Alfredo Kindelán para presentar el artículo 155 como garantía del respeto a la Constitución y a la ley, de que "ningún español es más otro", y de que España se mantendrá unida frente a quienes buscan disgregarla.

“En estos días convulsos, la Constitución ha de erigirse como el instrumento que nos ha permitido crecer como uno de los países más prósperos del planeta durante los últimos 40 años, un ejemplo de éxito político, social, económico y cívico”, ha dicho la ministra en presencia de numerosos militares españoles y extranjeros.

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"Solo quienes han demostrado desprecio por la ley pueden sorprenderse de que la ley sea aplicada”, ha continuado Cospedal, sin aludir expresamente al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont.  “Más allá de lecturas interesadas de quienes han hecho todo lo posible por hacer estallar las costuras del entramado constitucional, solo hay una cuestión: quién cumple la ley, quién la incumple y quién debe hacerla cumplir”, ha añadido.

Tras recordar que la misión de las Fuerzas Armadas es garantizar la soberanía e independencia de España, “salvaguardar los valores fundamentales y garantizar los deberes y principios democráticos”, ha concluido: “Frente a los que se alzan desde la sinrazón y hacen todo lo posible por disgregar hay una sola razón: la democracia”.

En el acto, celebrado en el Cuartel General del Aire, la ministra ha recordado a los dos pilotos fallecidos este mes en sendos accidentes aéreos: el capitán Borja Aybar y el teniente Fernando Pérez Serrano. También el jefe del Estado Mayor del Aire, el general Javier Salto, ha recordado la “triste pérdida” de ambos militares, pero ha asegurado que sus subordinados mantienen la “moral alta” y están preparados para cumplir su deber.