Rajoy se asegura media legislatura al superar el escollo del Presupuesto

Mariano Rajoy se ha asegurado media legislatura al lograr este miércoles que los Presupuestos Generales del Estado para 2017 superen el difícil escollo de la votación global en el Congreso de los Diputados. Pese a la moción de censura de Podemos, el arrinconamiento por los casos de corrupción o la difícil aritmética parlamentaria, el Gobierno ha logrado oxígeno político fundamental, lo que le permite poder alardear de estabilidad.

Más información

La ajustada votación de los Presupuestos obliga a acudir a diputados enfermos y con problemas familiare

El referéndum independentista catalán marca el debate de los Presupuestos

"España da un buen mensaje de estabilidad y confianza", ha asegurado el presidente satisfecho al acabar el debate.

Una a una, en casi quinientas votaciones, el PP ha sumado sus votos a los de Ciudadanos, el PNV, Coalición Canaria y Nueva Canarias en el pleno del Congreso para llegar al menos a los 176 votos, justo la mayoría absoluta, para salvar las cuentas y rechazar las enmiendas del resto de partidos.

Pese a su minoría, el PP ha conseguido que en todo el trámite no se incorpore ni una sola enmienda que no tuviera su voto, es decir, no ha habido en ninguna de las votaciones mayoría alternativa alguna a la que suponen los populares y los partidos aliados. De ahí la notable satisfacción del Gobierno, con Rajoy a la cabeza, visible en la cara de Cristóbal Montoro, autor ya de diez Presupuestos, y en los aplausos en pie de los diputados del PP.

Sin más sobresalto en las votaciones que anécdotas como el error en uno de los votos de Rajoy que quedó sólo en el no a una enmienda de Nueva Canarias, aunque sin trascendencia en el resultado; el caos en una de las votaciones en el grupo socialista y hasta el escaño roto del diputado de Ciudadanos Antonio Roldán. “Señorías, esto no es un circo, con todo el respeto al circo”, ha asegurado la presidenta del Congreso, Ana Pastor, al interrumpir las votaciones hasta que los ujieres cambiaron el sillón roto.

Ahora los Presupuestos tendrán que ir al Senado donde el PP tiene una cómoda mayoría absoluta y solo si se introducen cambios regresará al Congreso para ratificar las enmiendas introducidas, pero en todo caso con el trámite de ayer ya está garantizada su aprobación.

En octubre fue la abstención del PSOE la que permitió la investidura de Rajoy con el apoyo del PP, Ciudadanos y Coalición Canaria y ahora los socialistas han votado en contra junto a Podemos y soberanistas. El PNV ha pasado del no al sí, de la misma forma que el diputado de Nueva Canarias, Pedro Quevedo, elegido en las listas del PSOE, miembro del Grupo Mixto y crítico en octubre con Rajoy, hasta el punto de votar en contra de la investidura.

Además, la mayoría de acuerdos firmados por el Gobierno con otros partidos, especialmente con el PNV, se refieren no solo a partidas de estos Presupuestos, sino a ejercicios posteriores, lo que casi garantiza el apoyo futuro de los nacionalistas vascos. De hecho, en mes y medio deberá llegar al Congreso la aprobación del techo de gasto para 2018, antesala del proyecto de Presupuestos para ese año, y el Gobierno cree tener apalabrado ya el apoyo del PNV y de los dos diputados canarios.

Votaciones controladas

Ciudadanos ha vuelto a mostrar su sintonía con el Gobierno, mantenida sobre todo en asuntos económicos y sostenida con más dificultades en los que se refieren a regeneración democrática o reforma de las instituciones. El partido de Albert Rivera fue el primero en pactar la investidura con Rajoy y el primero en pactar el apoyo a los Presupuestos, con perspectiva también de prolongar ese respaldo a futuros ejercicios.

En el peor de los casos, sería posible prorrogar los Presupuestos que se aprueban ahora, lo que permitiría al Gobierno llegar hasta 2019, superando la mitad de la legislatura que empezó en 2016.

Desde el lunes se han debatido las cuentas en el pleno, con intervención de todos los ministros y de las diferentes votaciones. Se han incorporado en el pleno 31 enmiendas, la mayoría fruto del pacto entre el Gobierno y Nueva Canarias.

Las demás enmiendas votadas, presentadas por los grupos contrarios a los Presupuestos, han sido rechazadas sistemáticamente por el PP y sus aliados. Antes, unas 4.000 ni siquiera llegaron ser debatidas en la Comisión de Presupuestos por el veto de los populares con colaboración de Ciudadanos.