Siete años de cárcel por abusar de dos niñas y contagiar un herpes genital a una de ellas

La Audiencia Provincial de Zaragoza ha condenado a siete años de cárcel a Jorge Rafael B. P., de 36 años, por haber abusado sexualmente de la hija de su expareja y de una amiga de la pequeña, que cuando ocurrieron los hechos, en 2016, tenían nueve y siete años respectivamente. El hombre contagió a una de ellas una enfermedad de transmisión sexual, el herpes genital, infección producida por un virus que persiste durante toda la vida en el organismo y que se manifiesta físicamente a través de lesiones genitales y anales de forma recurrente. No existe, a día de hoy, un tratamiento eficaz contra esta dolencia.

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El tribunal considera probado que Jorge Rafael B. P., que mantenía una relación desde hacía siete años con la madre de E. y que vivía con la menor desde hacía dos años y medio, aprovechó que su pareja no estaba en casa y, al quedarse solo con E. y con una amiga de la pequeña, les pidió que se quitaran la ropa interior. Entonces rozó con los dedos los genitales de las niñas y les pidió que le hicieran una felación, a lo que ambas se negaron. También les mostró vídeos pornográficos y, posteriormente, les compró una gran cantidad de chucherías, algo que raramente hacía, para que guardaran el secreto.

Los hechos sucedieron en marzo de 2016, pero las niñas no contaron lo ocurrido hasta abril, cuando la madre de la amiga de E. llevó a su hija al médico porque la pequeña se quejaba de picores en los genitales. Le diagnosticaron una lesión hérpica que le había sido transmitida por Jorge Rafael B. P. La Audiencia Provincial considera que el condenado, que desconocía que era portador, no pretendía causar lesiones a las niñas, por lo que le ha absuelto del delito de lesiones del que le acusaba la Fiscalía.

El Ministerio Fiscal pedía 19 años de cárcel para el acusado. Finalmente, el tribunal ha condenado a Jorge Rafael B. P. a cuatro años de cárcel por un delito contra la libertad sexual de E.; a tres años de prisión por otro delito contra la libertad sexual de la amiga de E., y a seis meses de cárcel por haber mostrado material pornográfico a ambas. Además, le ha impuesto libertad vigilada durante cinco años, y será inhabilitado durante 10 años para cualquier profesión relacionada con menores. El hombre, que es insolvente, también ha sido condenado a pagar una indemnización de 18.000 euros a cada una de las niñas en concepto de daños morales.