El PSOE coincide con Podemos y Ciudadanos en un 76% de las votaciones
Sánchez explora la posibilidad de un acuerdo de investidura impulsado por las coincidencias entre las tres formaciones
El PSOE coincidió en un 76% de las votaciones del Congreso y el Senado con Ciudadanos y con Podemos durante la pasada legislatura, según el informe de la actividad parlamentaria de este partido. Esa combinación impulsa a Pedro Sánchez a pulsar la posibilidad de desbloquear la formación de gobierno con un acuerdo entre las tres formaciones. Sin embargo, Pablo Iglesias y Albert Rivera aseguran que sus diferencias de fondo en política económica, antiterrorista y territorial superan las coincidencias que demuestran las votaciones en las dos principales Cámaras del país y en los Parlamentos autonómicos.
La dirección de Podemos reconoce que se produjo una elevada coincidencia de voto con el PSOE y con Ciudadanos en la pasada legislatura y que esta también se da también en los Parlamentos autonómicos. No obstante, los principales dirigentes de la formación ponen el acento en las diferencias entre su proyecto político y el de Rivera, sobre todo en materia económica. Lo han destacado en los últimos días tanto Pablo Iglesias como Iñigo Errejón. La jefa de gabinete del secretario general, Irene Montero, llegó a afirmar que "Ciudadanos está inhabilitado" para el diálogo con Podemos sobre un Gobierno de coalición después de alcanzar un acuerdo de investidura con el PP.
Errejón, por su parte, solo quiere hablar de un pacto bilateral entre el PSOE y Podemos, único escenario que en su partido se considera posible. "Ese acuerdo necesitaría después de apoyos parlamentarios diferentes que podrían venir de Ciudadanos, que se comprometería a no bloquear la posibilidad de un Gobierno alternativo, o de diferentes formaciones catalanas o vascas. Nos parece que cualquier camino es válido siempre que el punto de partido sea acuerdo con PSOE", dijo al ser preguntado al respecto. En cambio, el portavoz de Compromís, Joan Baldoví, señaló que hay una "evidencia empírica" de que el PSOE, Podemos y Ciudadanos coinciden a menudo en las votaciones, lo que podría ayudar al entendimiento.
Los datos no solo reflejan la uniformidad de criterios de los tres partidos en materias muy variadas. Retratan, también, que ninguno está especialmente cerca del PP. Ciudadanos solo coincidió en un 40% de las votaciones de la pasada legislatura con el partido de Rajoy. El PSOE lo hizo en un 34%. Y Podemos se quedó en un 32%. La brevedad de la última legislatura no parece distorsionar esos porcentajes con su reducido número de plenos y temas tratados. Un estudio de EL PAÍS sobre las votaciones de Ciudadanos en los cinco Parlamentos autonómicos en los que es decisivo (Madrid, Murcia, Castilla y León, Andalucía y La Rioja) ya reveló que el partido de Rivera vota con mucha más frecuencia junto al PSOE y a Podemos que con el PP, independientemente de que en cuatro de esas Cámaras haya permitido la formación de Ejecutivos encabezados por representantes del partido de Rajoy.
“Pero una cosa es entenderse en una variedad de asuntos, consideración puramente cuantitativa, y otra es entenderse en lo esencial de lo cualitativo, exigencia mínima para sumarse a una investidura”, opina Juan Carlos Girauta, portavoz parlamentario de Ciudadanos, número tres del partido y miembro de su Ejecutiva. “Es absurdo creer que puede gobernar un partido con 85 escaños", añade. “Lo que tiene que hacer el PSOE es entenderse mínimamente con el PP para desbloquear esta situación. Son dos partidos constitucionalistas, ambos han gobernado, se les supone sentido de Estado”.
Diputados del PP y del PSOE han confirmado a este diario que los resultados de las votaciones han afectado a las estrategias de todos los partidos en las negociaciones para formar gobierno. De hecho, Rivera propuso a Sánchez en una carta publicada en EL PAÍS que dejara que gobernase Rajoy para que ambos pudieran formar un frente que marcara la agenda del ejecutivo del PP desde la oposición.
El ofrecimiento se basaba en las coincidencias entre los partidos que demuestran las votaciones. Sin embargo, el secretario general de los socialistas estudia emplear esos mismos cimientos como base de otra operación. Quiere saber si hay alguna forma de combinar a Podemos y Ciudadanos para lograr un gobierno del PSOE. Por ahora, su proyecto se ve dificultado por la incompatibilidad declarada entre Iglesias y Rivera. Como escribió Sánchez el mismo viernes: "De poco valen las actitudes de nuevos partidos que hacen bandera de la regeneración cuando con sus vetos mutuos consiguen lo contrario".
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