Zapatero pide abrir un “diálogo interno” en el PSOE sobre la formación del Gobierno

Si las circunstancias políticas cambian, el PSOE se verá obligado a abrir un debate interno sobre si mantiene o modifica su posición respecto a la investidura de Mariano Rajoy. Esta situación nadie la niega, pero pocos la expresan en alto aunque empieza a haber excepciones. El expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha agitado las aguas al pedir “un proceso de diálogo interno” sobre la formación de Gobierno porque, en todo caso, lo que hay que evitar es la celebración de unas terceras elecciones en un año. Al PP le pide que “haga los esfuerzos necesarios” al haber sido el partido ganador.

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Las breves declaraciones del expresidente socialista en León dieron pábulo de inmediato a todo tipo de consideraciones en números ámbitos socialistas. La primera interpretación de sus palabras fue que el exmandatario seguía la senda de su antecesor socialista en la presidencia del Gobierno, Felipe González, quien ha pedido sin ambages la abstención del PSOE en la investidura de Rajoy “aunque no se lo merezca”. Así lo expresó en una entrevista al diario argentino Clarín y, días antes, en un artículo en EL PAÍS.

Zapatero no estaba pidiendo exactamente lo mismo, señalan interlocutores que le conocen. “Pide debate, ya que este se produce de manera soterrada”. Su buena relación con la presidenta de Andalucía, Susana Díaz, y con el parlamentario vasco Eduardo Madina provocó que miembros del partido cercanos al secretario general, Pedro Sánchez, interpretaran que también Andalucía apoya esta discusión, y, por extensión, otros presidentes autonómicos y secretarios regionales. Tampoco esta apreciación es del todo exacta. “Quiere que se mueva el árbol”, señaló un dirigente ente regional, lo que no implica necesariamente que abogue por la abstención en la investidura de Rajoy.

En lo que coincide el expresidente con la línea oficial de su partido es en pedir al PP que haga los esfuerzos necesarios para encontrar una mayoría. “Sería negativo e inconveniente celebrar unas terceras elecciones”, señaló. Los medios de comunicación presentes en León, en un acto de homenaje al fallecido alcalde de Villagatón-Brañuelas, Benjamín Geijo, le pidieron su opinión sobre qué hacer ante el bloqueo institucional que se deriva de la situación actual. “Lo peor que hay en la vida es dar un consejo no pedido”, contestó, pero, dicho eso, se animó: “El PSOE debe abrir un proceso de diálogo interno que aúne el máximo consenso posible”.

El mandato del comité

Si Zapatero reclama diálogo en el partido es porque percibe que esa unidad de criterio no está clara, aunque lo que prevalece es la decisión del 20 de diciembre del comité federal que rechazó de plano propiciar, “por acción u omisión”, un Gobierno del PP. La postura no ha variado ni una coma tras los comicios del 20-J, y fue la que llevó Sánchez a su entrevista con Rajoy del martes. Esta posición estática es la que ayer Zapatero puso en tela de juicio al pedir responsabilidad a todos los partidos políticos. A todos y no solo al PSOE, recalcó, consciente de que toda la presión recae ahora sobre los socialistas, como el día anterior pusieron de manifiesto tanto Rajoy como Rivera. El exmandatario citó como partidos que algo tendrían que decir al respecto a Podemos y al PNV, y expresó el “carácter dialogante” de los nacionalistas vascos, que él pudo comprobar en su etapa de presidente del Gobierno. Con los independentistas el diálogo “es más complicado”, reconoció.

Hasta ahora, el diálogo para encontrar una solución lo ha pedido el presidente extremeño, Guillermo Fernández-Vara y la abstención ante la investidura de Rajoy, solo la ha expresado con claridad Felipe González. El resto de la organización, y sus principales dirigentes territoriales, se mantienen en silencio.