Zapatero: “Agradezco las palabras de Iglesias, son un reconocimiento al PSOE”
"Ya reconoce que los mejores presidentes de la democracia son socialistas", ironiza Pedro Sánchez
José Luis Rodríguez Zapatero ha cerrado filas con Pedro Sánchez y ha marcado distancias con Pablo Iglesias, con el que mantiene una relación cordial y que la víspera le valoró como el “mejor presidente de la democracia”. “Agradezco sus palabras, pero son un reconocimiento al PSOE”, se ha desmarcado el expresidente del Gobierno. Zapatero ha reclamado la socialdemocracia como ideario exclusivo de los socialistas. “Nosotros nunca hemos sido antisistema”, ha afirmado.
“Iglesias ya reconoce que los mejores presidentes de la democracia son socialistas. Y tiene razón”, ha tirado de ironía Sánchez ante 2.000 seguidores en el polideportivo La Victoria. El candidato socialista reivindicó en diciembre la gestión de Zapatero cuando todavía incomodaba en muchos sectores del PSOE. El abrazo entre ambos en un mitin en Gijón implicó el reconocimiento del legado social del último presidente socialista (2004-2011).
“Por razones de futuro este país necesita un gobierno equilibrado entre la responsabilidad y el compromiso social. Y eso lo representa el PSOE”, ha expresado Zapatero, que ha recordado a la diputada laborista asesinada en Reino Unido y a los 50 gais asesinados en Orlando (EE UU). “Llevamos unos meses que todo es nuevo o viejo. Antes era la vieja política… No. La política es la política. Y hay política sentida y perseverada, como siempre ha hecho el PSOE”, ha remarcado, en otra muestra de alejamiento hacia el líder de Podemos. “Está muy bien que todos quieran ser socialdemócratas, pero para socialdemocracia el PSOE”, ha abundado en ese sentido.
El único mitin conjunto de esta campaña en el que Sánchez y Zapatero compartirán cartel ha estado marcado por las buenas palabras de Iglesias, que incluso consulta a Zapatero sus “dudas sobre temas importantes”. Todos los cargos del PSOE consultados, fueran cuadros medios o miembros de la dirección nacional, lo interpretan como un intento de Iglesias, que aspira al sorpasso con Unidos Podemos, de atraer a parte del electorado socialista. “Ahora dice que es socialdemócrata… Pablo, los socialistas de corazón no te creen nada. Ni lo que digas hoy ni mañana”, ha observado Soraya Rodríguez, candidata por Valladolid. Ante la expectación generada, la reacción de Zapatero no ha dejado lugar a las especulaciones: “Se gana cuando se va a ganar. Y esa determinación y honestidad que ha demostrado Pedro Sánchez nos va a llevar a ganar”.
Castilla y León adquirió el 20-D una dimensión inusitada para el PSOE: el control de daños en la región —se pasó de 11 a nueve diputados, y se mantuvieron los nueve senadores—, combinado con el hundimiento en Cataluña y Madrid, propiciaron que se convirtiera en el territorio que más asientos aportó a los socialistas en el Congreso y en el Senado, solo por detrás de Andalucía (22 diputados y 17 senadores).
“Una de nuestras mayores fortalezas es la gestión en el municipalismo, hemos consolidado gobiernos municipales en zonas tradicionales del PP”, explicaba Luis Tudanca hace unos días. El secretario general autonómico, que no asistió al acto al encontrarse enfermo, destaca el peso municipal, con 500 alcaldes —2.248 localidades se reparten por Castilla y León— que representan el 36% de su población.
La federación castellanoleonesa también puede presumir de tener al único alcalde socialista de capital de provincia con mayoría absoluta (Carlos Martínez, en Soria). También gobierna, en coalición, en Valladolid, tras 20 años del PP. Su alcalde, Óscar Puente, ha bromeado con las consultas de Iglesias a Zapatero: “Si te pregunta cuando tiene dudas, no vas a dar abasto... Pero donde no tuvo ninguna fue en no permitir un presidente socialista. Podía haberte llamado entonces para que le hubieras echado una mano”.
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