Espadaler se desvincula del ‘pelotazo’ de Pujol Ferrusola con un vertedero

El candidato de Unió a presidente de la Generalitat y exconsejero catalán de Medio Ambiente, Ramón Espadaler, se ha desvinculado este viernes de la supuesta comisión de 4,3 millones de euros cobrada por Jordi Pujol Ferrusola, hijo mayor del expresidente de la Generalitat, por la implantación del vertedero de Tivissa (Tarragona) entre 2002 y 2004. Espadaler, responsable de la consejería de Medio Ambiente en aquellos años, ha asegurado que no conocía personalmente entonces, ni conoce ahora, a Pujol Ferrusola, según fuentes jurídicas.

El aspirante de Unió ha declarado por videoconferencia ante el juez de la Audiencia Nacional José de la Mata, instructor del caso sobre el primogénito de los Pujol. Espadaler ha sido citado por los empresarios Josep Mayola y Gustavo Buesa, que compraron por cinco millones de euros a Pujol Ferrusola su participación en el vertedero. El hijo del expresidente catalán había invertido en la planta de procesamiento de residuos un total de 700.000 euros. Diez días después de la operación, Buesa y Mayola vendieron la instalación a una empresa filial de FCC por 16 millones.

Espadaler, consejero en el último Gobierno de Jordi Pujol, ha asegurado que en aquella época su actuación se limitó a recibir los informes de distintas administraciones y organismos sobre el vertedero y a darles el visto bueno, ya que eran informes positivos, según fuentes presentes en el interrogatorio.

Su sucesor en el cargo, Salvador Milà, de ICV, ha negado también cualquier relación con Pujol Ferrusola. Milà, que otorgó la autorización definitiva para el vertedero, el llamado número de gestor, ha asegurado que no sufrió ninguna presión por parte de Pujol Ferrusola para dar luz verde al proyecto. “Lo único que hice fue alcanzar un acuerdo con los alcaldes del territorio para que el vertedero solo diera servicio a esa zona y no fuera un macrovertedero”, ha asegurado.

También ha declarado el consejero delegado de Enagas, Marcelino Oreja Arburua. Este trabajó antes como director de Expansión Internacional de Emte, empresa de la familia Sumarroca, que pagó a Pujol Ferrusola 158.000 euros entre 2008 y 2009. El juez quería saber si el hijo del expresidente catalán realmente realizó los trabajos por los que se le abonaron esas cantidades. Oreja se desvinculó de los contratos con Pujol Ferrusola, con quien realizó un viaje a México para buscar a dos delegados para Emte en ese país. Oreja ha afirmado que no sabe si hay soporte documental del trabajo de Pujol Ferrusola en México.