Posada: “La clase política española no es corrupta”

La semana ha empezado para el Partido Popular con otro mazazo por la detención del senador Francisco Granados que fue secretario general del PP de Madrid y mano derecha durante años de la expresidenta madrileña Esperanza Aguirre. El presidente del Congreso, Jesús Posada, reconoce que esta mañana su “sorpresa” fue mayúscula pero contra viento y marea quiere defender a los políticos españoles. A la pregunta de si España tiene una clase política “corrupta”, al menos por la actuación de los partidos mayoritarios la respuesta es un no tajante.

“La mayoría de los integrantes de los partidos está formada por gente decente, dedicada a su trabajo y sí hay una minoría con comportamiento irregular que a los ciudadanos les parece que son mayoría”, ha dicho el presidente del Congreso en un encuentro informativo con la Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP). Posada, dedicado a la política en Castilla y León, como presidente, ministro con José María Aznar y presidente del Congreso, da fe de que la mayoría de los políticos españoles se comporta adecuadamente.

Mal tiempo para hacer una defensa de los políticos y sobre todo del PP pero él lo hace. “La justicia es inexorable y llega” aunque su lentitud distorsiona la percepción de su eficacia. Además, esa lentitud traslada al presente hechos que ocurrieron tiempo atrás y que afecta en estos momentos al PP, CiU y PSOE; este último colateralmente por el caso de los ERE de Andalucía que tocan a ex altos cargos de la Junta de Andalucía.

Corrupción y vísperas del sucedáneo de consulta que se producirá el próximo 9 de noviembre en Cataluña son asuntos que centran la preocupación del presidente del Congreso. “El 9 de noviembre no termina nada sino que culmina un camino equivocado por parte de todos”, ha reconocido Posada en una declaración no del todo ortodoxa dentro de las filas del PP, al menos las públicas. Durante muchos "el trato" a Cataluña ha sido correcto, en los asuntos “ordinarios” pero quizá se podía haber hecho mejor, ha opinado Posada, tercera autoridad del Estado y que fue ministro de Administraciones Públicas. “Lo cierto es que no todos pero hay una parte importante de catalanes que se consideran maltratados y hay que afrontar esa situación”. Por tanto, después del 9 de noviembre pide diálogo. “Escuchémosles”, propone. Hasta entonces, no tiene la menor duda de que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, hace lo adecuado: “hacer cumplir la ley”.