Arranca sin consenso la semana de movilización de la escuela pública
La protesta contra la LOMCE y los recortes es la propuesta alternativa a la huelga de estudiantes entre los días 21 y 23 de octubre
La Plataforma Estatal por la Escuela Pública (formada por padres, estudiantes y sindicatos de profesores) convocó a mediados de septiembre a los centros escolares para celebrar desde este lunes una semana de encierros contra los recortes y la aplicación de la Ley Orgánica para la Mejora Educativa (LOMCE).
La iniciativa debía empezar, según anunciaron desde la confederación de padres y madres de alumnos, con convocatorias este mismo lunes para abrazar las instituciones con competencias en educación y simbolizar así que no pertenecen "a quienes en este momento están dentro sino a los ciudadanos”. Aunque se anunciaron para el día 6, no hay nada previsto frente al Ministerio de Educación, símbolo máximo de la reforma de la enseñanza contra que protestan, ni ninguna actividad en la que todos vayan de la mano. La plataforma no se reunió la semana pasada, según explican desde el sindicato STES, y tampoco ha previsto de momento reunirse en esta.
Cada centro debe decidir si organiza encierros de un día o de una semana o no se suma a ningún tipo de movilización. La convocatoria no prevé que estas protestas paralicen las clases, sino que se hagan fuera del horario lectivo. “Los primeros deberían ser esta noche [por el lunes] pero creo que será difícil porque en muchas comunidades autónomas hace falta que se apruebe con una votación del consejo escolar para evitar problemas con los gobiernos regionales”, explica Jesús Salido, representante de CEAPA, la confederación de padres de la enseñanza pública.
Las protestas se anunciaron después de que la plataforma no alcanzara una postura común sobre una posible huelga. De momento, el Sindicato de Estudiantes mantiene su convocatoria de paro entre los días 21 y 23 de octubre, los padres la rechazaron ya en septiembre (su respaldo fue decisivo en las protestas contra la LOMCE de cursos previos) y los sindicatos muestran posturas encontradas.Y tres sindicatos (CC OO, CGT y Ustea) han convocado paros parciales el 23 de octubre en los centros escolares de Andalucía, informa Manuel Planelles.
La semana pasada se presentaron los presupuestos del Ministerio de Educación para 2015, que suponen una congelación de la partida de becas y 48 millones menos (casi un 90% de recorte) para educación compensatoria, destinada a garantizar la equidad.
UGT no la respaldará tras hacer una encuesta a sus afiliados en la que ganó el rechazo. “La LOMCE hay que tirarla con la votación política”, ha señalado Carlos López Cortinas, responsable nacional de UGT. El sindicato, igual que el PSOE, considera que las actuaciones se deben centrar en preparar una alternativa a la reforma educativa para tenerla lista en caso de que el Gobierno pierda las elecciones generales el próximo noviembre. El sindicato STES también se ha quedado al margen de la huelga tras consultar a sus afiliados, explica Voro Benavent, coordinador de acción sindical de esta central.
Comisiones Obreras, que comenzó el curso anunciando que buscaba apoyos para ir a la huelga, deja ahora esta propuesta en “espera”, según Francisco García, responsable del sindicato en educación. “Puede que no se convoque porque debería hacerse con el respaldo de toda la comunidad educativa, y no lo tenemos”, valora García. “Seguimos pensando que es necesaria, pero solo si tiene un apoyo mayoritario”.
Desde el Sindicato de Estudiantes siguen preparando la huelga de finales de octubre “para que el Gobierno dé marcha atrás”, según Ana García, secretaria general del sindicato. “Apoyamos las protestas de esta semana, pero estamos más concentrados en organizar los paros”, añade.
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