Santamaría promete que Rajoy hablará con Mas con “espíritu abierto”

La fecha para la reunión entre Mariano Rajoy y Artur Mas sigue sin estar fijada, pero tanto el Gobierno como la Generalitat quieren ofrecer muestras de buena voluntad. La vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, ha asegurado en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros que el presidente acudirá a esa cita con “espíritu abierto”. Eso sí, ha dejado clarísimo que no discutirá nada sobre la consulta que Mas ha convocado para el 9 de noviembre. De hecho ha reprochado al presidente que insista en defender un referéndum ilegal.

“Ese referéndum no se va a celebrar y esa posición de entrada de Mas dificulta mucho la apertura de un proceso de diálogo, pero vamos a esa reunión con espíritu abierto, creemos que hay muchos aspectos de la vida de los catalanes en los que ambos pueden y deben entenderse, nos gustaría conocer la posición sobre el referéndum del señor Mas porque si estamos en sostenella y no enmedalla en un punto en el que el Gobierno no tiene capacidad de negociación eso hace todo más difícil”, ha asegurado Sáenz de Santamaría.

Mientras se producía la rueda de prensa, Rajoy estaba reunido con la cúpula directiva de Pimec, una asociación de pequeñas empresas catalanas que agrupa a 110.000 pequeños empresarios. Aunque la reunión se ha montado a última hora, después de que se supiera que Rajoy y Mas se iban a ver, y por tanto se interpretó que el presidente del Gobierno les invitaba para evaluar el ambiente del empresariado catalán frente al proceso soberanista, el presidente de Pimec, José González, aseguró que en dos horas reunión ni ellos ni Rajoy habían hablado una palabra de la crisis soberanista. “Se lo puedo jurar”, llegó a decir ante la sorpresa de los periodista.

Pimec se ha mostrado a favor del derecho a decidir y González explicó que mantienen esa posición pero tienen 110.000 socios y “los hay muy del PP y otros muy independentistas”, con lo que ellos como organización prefieren no entrar en este delicado debate. “Me he quedado muy tranquilo de que no tengamos que hablar de este tema que nos causa dificultades de representatividad. Nosotros, a lo nuestro”, llegó a decir aliviado González. Ellos no lo sacaron y el presidente tampoco. Rajoy habló con ellos durante dos horas de la reforma fiscal, la reforma laboral, los problemas de las pymes, la financiación, el IVA de caja y cuestiones del sector.

El presidente ofrecía así un gesto, después de reunirse esta misma semana con representantes de Societat Civil Catalana, contrarios a la independencia, para demostrar que además de la consulta hay otros muchos asuntos que interesan en Cataluña y él está encima de ellos. “También somos el Gobierno de los catalanes”, insistió Soraya Sáenz de Santamaría para abundar en esta idea.