La justicia es más rápida en Baleares

Los fiscales de Baleares han repartido por los juzgados de las islas hasta 55 casos de corrupción en estos años con cerca de 1.000 imputados, algunos tan mediáticos como el del alcalde de Andraitx (Eugenio Hidalgo), el expresidente Jaume Matas, la vicepresidenta María Antonia Munar y el más polémico, Iñaki Urdangarin. Baleares acredita un dato elocuente: allí la justicia es más rápida. ¿Por qué?

Una de las razones descansa en una estrategia diferente de la que se aplica en otras fiscalías. Los fiscales son quienes llevan la investigación y dirigen la acción policial, pero evitan caer en la tentación de los macroprocesos. Trocean los casos en piezas separadas, “que sean asumibles para los tribunales y para la instrucción”, asegura uno de los fiscales. “Quien acusa debe llevar la investigación porque la legislación está hecha para obstaculizar la justicia”, afirma.

Uno de los casos que mejor explican cómo es el estilo balear es el de Andraitx, que afectaba al alcalde (Hidalgo), a un jefe de Urbanismo y director general del Territorio (Jaime Massot) y a un celador municipal (Jaime Mateo Gibert). El caso se parceló en 78 piezas separadas (53 de ellas cuya instrucción ha finalizado), lo que ha motivado ya 20 sentencias (18 de ellas condenatorias, de las cuales 16 son firmes), de tal suerte que el exalcalde ha sido penado a seis años de prisión, diversas penas de multa, inhabilitación y demolición de lo construido por: edificar en terreno protegido (pieza 56), dar una licencia ilegal (56), desobedecer una orden judicial (74), negocios urbanísticos incompatibles con su cargo (60), cobrar de un constructor (60), destruir documentos oficiales (60), prevaricación continuada (60) y por encubrimiento (2).

El caso estrella es el llamado Palma-Arena, que se ha dividido en 26 piezas. Pues bien, en enero de 2012 se celebró el juicio oral de la pieza 2, en el que el tribunal dictó sentencia condenatoria para el expresidente balear y exministro Jaume Matas. La pieza 25 es de sobra conocida: el caso Urdangarín. Y sigue su curso en solitario.