Y Luxemburgo le devolvió la casa a María del Mar y sus dos hijos
Una juez paraliza un desahucio gracias al tribunal europeo
María del Mar Moral llamó a Rosa Agudo, del grupo de Viviendas de Valdemoro, nacido de la Asamblea del 15-M, tras leer varias veces el papel. “¿Tú entiendes lo mismo que yo?”, le preguntó. El texto jurídico le sonaba a chino. “Visto el estado del presente procedimiento, se acuerda la suspensión del mismo”, señalaba la providencia de un juzgado de Valdemoro (Madrid) basada en la reciente sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea que otorga poder a los jueces españoles para frenar desahucios. “¿Qué va a ser, mujer? ¡Que el piso es tuyo!”, le respondió Agudo. Suyo por ahora, porque la sentencia de Luxemburgo solo permite a los juzgados españoles paralizar cautelarmente los desahucios mientras se estudia si en el contrato hipotecario había cláusulas abusivas.
María del Mar, de 34 años, rememora aquella conversación en el salón vacío de su casa, el bajo que le ha devuelto temporalmente una juez en una providencia contra la que cabe recurso del banco. El piso fue subastado el 21 de marzo. Llevaba dos años sin pagar la cuota, unos 800 euros que abonaba a medias con el otro titular de la hipoteca, su exmarido. Asegura que él se marchó de casa cuatro años atrás y dejó de pagar su parte. A ella no le llegaba con los 1.100 euros que cobra en la perrera municipal. “Hace dos años fui a mi sucursal en Getafe y les dije que se quedaran con la casa, que no la podía mantener. El empleado me respondió que ese no era su problema y me eché a llorar”, asegura. “Fue entonces cuando dejé de pagar y no pienso poner un euro más hasta que lo diga un juez”. Debía unos 198.000 euros que se han convertido en 256.000 con los intereses, según sus cálculos.
La sentencia europea ha dejado un vacío legal que están llenando algunos jueces. Belén Pérez, titular del juzgado de instrucción 5 de Valdemoro, se adelantó y dejó en suspenso la ejecución de María del Mar Moral el pasado 20 de marzo, como hicieron otros colegas suyos antes en Lanzarote o Valencia. La intervención de la juez de Valdemoro, que ha declinado hacer declaraciones, es la primera de la que se ha tenido conocimiento en Madrid, según fuentes jurídicas.
La vecina de Valdemoro prepara ahora su segunda mudanza en menos de un mes. Unos días antes de que subastaran su piso, cogió a sus dos hijos, de 7 y 11 años, y se marchó sin esperar a la ejecución hipotecaria. “Los niños pasan mucho tiempo en casa sin mí y no quería que llegara la policía para echarnos y les pillara solos”, dice en mitad del salón lleno de cajas. Su compañero de piso, al que cedió una habitación para compartir gastos, coloca el perchero de la entrada.
Agudo no tuvo ni tiempo a asesorarse sobre el desahucio de Moral para intentar frenarlo:“Se adelantó la juez”. La activista enseñó el papel del juzgado entre aplausos durante el escrache en la sede del PP de Madrid.
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