Montoro desata la pugna entre las comunidades por el reparto del déficit

La comunidad que más recortó fue donde más cayó el PIB el año pasado. Las consecuencias del sorprendente milagro de Castilla-La Mancha [fue la que más redujo sus números rojos en 2012] ha abierto los ojos al Gobierno. Los recortes conjugan mal con el crecimiento económico. Y eso, crecer, es el nuevo objetivo del Ejecutivo para dejar atrás la persistente crisis. Por eso, el Ministerio de Hacienda suavizará el objetivo de déficit de las comunidades, ahora en el 0,7% del PIB. Pero antes debe obtener margen de Bruselas.

El exigente recorte del año pasado sirvió para calmar a la Comisión Europea y a los mercados que creían que las cuentas autonómicas estaban fuera de control. Una vez ganada la credibilidad hay que seguir cuadrando los presupuestos pero sin agravar aún más la crisis. “El límite es seguir cuadrando las cuentas sin agudizar la recesión económica”, ha dicho este jueves Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda.

En la agenda del Gobierno también figura la cuestión catalana. El Gobierno de Mas es uno de los que tienen más dificultades financieras. Fue, también, una de las que más se desvió del objetivo de déficit el año pasado (1,96%, cuando la meta era el 1,5%). Para calmar a las comunidades, exhaustas por los recortes, y lanzar un guiño a Cataluña, Montoro pretende fijar un déficit diferente para cada territorio. Para ello, ha creado este jueves un grupo de trabajo en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF). El plan ha desatado la división entre las comunidades.

Madrid, Castilla y León y Extremadura, las más aventajadas, se oponen abiertamente a que se establezca un objetivo asimétrico. Consideran que de esta forma es más difícil lograr la meta de déficit conjunta (porque unas se desviarían esperando a que otras cumplan). También creen que techos diferentes de déficit perjudican a las que han cumplido y beneficia a las incumplidoras.

La situación se antoja complicada para Montoro. Algunas comunidades podrían tener más déficit que el que registraron en 2012. “Me suena raro, pero se ha abierto tanto el abanico entre unas comunidades y otras....”

El consejero extremeño, Antonio Fernández, fue el responsable de que su territorio presentase el menor déficit en 2012 (0,69% del PIB). Este jueves se ha opuesto firmemente a la idea de fijar una meta distinta para cada administración y ha reclamado “un reconocimiento” a las que mejores resultados han presentado. En el lado contrario Cataluña, Comunidad Valenciana, Murcia y Andalucía, que registraron en 2012 los peores datos de déficit. El consejero catalán, Andreu Mas-Colell, ha propuesto relajar el tope de desviación presupuestaria. Y ha planteado elevarlo hasta un tercio del límite que fije Bruselas.

Las comunidades han votado, tras un intenso debate, a favor de la creación del grupo de trabajo para ver cómo se reparte el déficit. Pero Madrid ha apuntado que el resultado de este grupo podría ser que todas mantengan la misma meta. La batalla está en los criterios que se fijen para establecer los objetivos individuales.

Además de crear otro grupo para la reforma del sistema de financiación, varias comunidades han pedido un nuevo mecanismo de liquidez para pagar deudas atrasadas. Las administraciones acumulan más de 10.000 millones de facturas impagadas.