ERC avisa: no cederá en la consulta

Esquerra Republicana no parece inquieta por las llamadas del presidente de la Generalitat, Artur Mas, al diálogo con el Gobierno de Mariano Rajoy. Los republicanos entienden que, antes de convocar la consulta sobre la autodeterminación en 2014, el Ejecutivo catalán debe demostrar que no es posible organizar ese referéndum con el permiso del Estado. “El diálogo [con el Gobierno] es bueno, pero hasta cierto punto. Es una situación transitoria para cargarnos de razón”, argumentó la portavoz republicana, Anna Simó, que avisó: “El diálogo no puede ser excusa para la inacción”.

Para la portavoz republicana, negociar con el PP para que apruebe una consulta sobre la autodeterminación “no sirve para nada” y “parece un chiste”. Aunque en el pacto que firmaron ERC y CiU este proceso de negociación está previsto para “ganar legitimidad” con una probable negativa del Gobierno, como recordó Simó.

Los republicanos apuntan como prioridad absoluta relajar el objetivo de déficit, y para lograr esta meta dan carta blanca al Gobierno de CiU, cuya estabilidad parlamentaria depende de los votos independentistas. Hay, sin embargo, una línea roja: la consulta es irrenunciable. “Hay un acuerdo parlamentario muy claro. Y eso es lo que la ciudadanía reclamó en las elecciones. Lo que debe hacer [el Gobierno de Mas] es tirar adelante con liderazgo, claridad, y sin que le tiemblen las piernas. Pero ERC no cederá. Ni el país tampoco”, alertó Simó.

Los republicanos entenderán cualquier paso atrás en la consulta para favorecer el diálogo con el Estado como una ruptura del pacto parlamentario. Y actuarán en consecuencia: dejando al Ejecutivo de CiU en minoría. Este escenario abocaría a la federación nacionalista a dos escenarios: buscar otro apoyo, o convocar elecciones anticipadas. “Cualquier alternativa que no sea la consulta pasa por frenar el mandato que salió de las urnas”, mantuvo Simó.