Barcina logra cuatro años más como líder de UPN

La semana más difícil de la presidenta navarra, Yolanda Barcina, ha terminado con suspiro de alivio. El IX Congreso de Unión del Pueblo Navarro ha renovado a Barcina como presidenta de la formación con una ajustada mayoría del 52,78% de los votos frente al hasta ahora número dos del partido, Alberto Catalán. Algo más de 1.500 afiliados han acudido este domingo al cónclave regionalista y de ellos 871 han dado su voto a Barcina y 795 han optado por Alberto Catalán. El sistema para elegir los cargos de responsabilidad de UPN hace que por un estrecho margen el sector afín a Barcina se haga con toda la ejecutiva, la vicepresidencia y la secretaría general

No obstante, Barcina en su discurso de agradecimiento ha optado por intentar restañar las heridas abiertas por la carrera por el liderazgo y ha ofrecido a Alberto Catalán la posibilidad de continuar en la directiva de la formación. La presidenta navarra ha abogado por “cerrar esta amarga semana y abrir una nueva etapa de unidad” en UPN y ha señalado que los únicos derrotados hoy son “los que querían ver al partido y al gobierno más débil”.

Barcina ha jugado precisamente la baza de la inestabilidad que abriría que la presidenta del Gobierno perdiera el liderazgo de su partido como principal argumento de campaña frente a Catalán, que se presentó como abanderado de un impulso a la actividad interna de la formación, que considera Barcina ha dejado arrinconada por la atención a los problemas del ejecutivo. Las semanas previas al congreso han estado marcadas además por los pormenores que la investigación judicial sobre la desaparición de Caja Navarra han ido revelando. La percepción de cuantiosas dietas dentro de un órgano sin funciones ejecutivas en la entidad financiera ha dañado la imagen de Barcina, pese a que ese sistema de remuneraciones fue ideado por el anterior presidente, Miguel Sanz.

Tras renovar el cargo por cuatro años más, Barcina ha anunciado una renovación de las estructuras del partido, algo que se interpreta como un intento por romper con su antecesor, Miguel Sanz, que se ha decantado por apoyar la candidatura de Alberto Catalán. La presidenta navarra, que cuenta con 19 de los 50 escaños del Parlamento foral, ha llamado de nuevo al diálogo con el PSN. En junio de 2012 expulsó a los consejeros socialistas del gobierno hasta entonces de coalición.