"Llevo tres meses en Dublín porque en España no encuentro un hueco"
"Nuestras debilidades como sociedad son una mentalidad egoísta y, sobretodo, chapucera"
Soy Daniel Rodríguez (34 años), de Salamanca, licenciado en Administración de Empresas, MBA el año pasado y con más de ocho años de experiencia en contabilidad. En la actualidad, llevo unos tres meses residiendo en Dublín porque en España no encuentro un hueco. Me gustaría explicar algunas cosas que observo desde mi posición. Dublín está lleno de españoles, vas por la calle y es muy común escuchar castellano, es entonces cuando te das cuenta de que no es normal de España: hay mucha gente joven y no tan joven cansada del inmovilismo laboral. Como ya sabéis es gente preparada, con o sin experiencia, idiomas... muchos amigos míos de Salamanca se encuentran en situaciones parecidas que nos hacen vivir en el alambre sin perspectivas a medio plazo y sin estabilidad.
Creo que somos una sociedad enferma, con futuro incierto. Nuestras debilidades como sociedad son, a mi entender, una mentalidad egoísta y, sobretodo, chapucera. Desde mi experiencia, el volumen de negocios en dinero negro y la incapacidad de muchos de los gestores empresariales y políticos frena nuestro desarrollo. Somos malos organizándonos, peor utilizando las inmensas posibilidades de las nuevas tecnologías en las empresas. Trabajamos mucho pero el esfuerzo es poco productivo porque hacemos las cosas dos y tres veces debido a que no pensamos, nos limitamos a "hacer rápido" y con eso pensamos que trabajamos bien cuando no es así. No invertimos en mejorar, solo en sobrevivir cuando no queda mas remedio, nuestra planificación es casi nula. Mientras los bancos abusan para corregir los excesos del pasado, nos ahogan con sus políticas restrictivas del crédito y todo nos da como resultado la paralización y posterior retroceso del país.
Valoro el autoempleo como salida, pero luego escuchas historias como las de un amigo que tiene una empresa y ha tenido que recurrir al mercado negro de las tarjetas de transporte para poder circular con su camión pagando a un señor (¿traficante?) mucho dinero para estar dentro de la ley (le transfiere una tarjeta), porque no existe otra opción viable económicamente (no le permiten la renovación de su tarjeta caducada si no compra un camión nuevo) y entonces piensas: ¿Que hace la administración si no es poner trabas o articular una burocracia perversa, en lugar de facilitar las cosas y ayudar al empresario?
La opción la veo en el extranjero por triste que sea.
Daniel
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.