El Gobierno extremeño acusa a Vara de ocultar un déficit del 6,81%

La Junta de Extremadura, que preside José Antonio Monago (PP), acusó ayer al anterior Gobierno de la comunidad, dirigido por Guillermo Fernández Vara (PSOE), de ocultar en los presupuestos de la comunidad para este año un déficit del 6,81% (1.240 millones de euros), cuando el máximo previsto por el Estado para todas las autonomías es del 1,3%. Según los gestores de la Junta surgidos de las elecciones del 22-M, ese dato se debe a las “trampas” del anterior Ejecutivo, al que acusó de basar las cuentas públicas para 2011 en “supuestos falsos” y de incluir ingresos y gastos “ficticios”.

Entre esos ingresos estarían, según el Gobierno del PP, 177 millones de euros correspondientes al pago de la deuda histórica del Estado con Extremadura que el Gobierno central no ha satisfecho. También otros 102 millones más, procedentes del Fondo de Cooperación, que tampoco llegaron, según la Junta, así como otros 89 millones procedentes de ventas de viviendas que no se realizaron. Solo esos fondos supuestamente dejados de percibir suponen un 2,02% de déficit.

El consejero extremeño de Economía y Hacienda, Antonio Fernández, calificó esa cifra de “peligrosa” y la atribuyó a la “miopía” del anterior Ejecutivo regional, que se concentró “en lo inmediato en lugar de preocuparse por lo que podría venir y del futuro de los extremeños”. Entre los peligros para los ciudadanos que citó el consejero se encuentra la disminución de las prestaciones sociales, debido a la necesidad de reducir la deuda. También auguró “tensiones” en la tesorería regional con aplazamientos de “pagos a proveedores y otros acreedores no financieros”, aunque después aseguró que todo eso “no va a suceder” gracias a los presupuestos “austeros y realistas” que prepara el Gobierno regional del PP.

Entre las medidas que incluirán las nuevas cuentas se encuentra la reducción de coches oficiales, lo que permitirá, dicen, “un importante ahorro en seguros y garajes”. La Junta también tiene previsto estudiar “la razón de ser” de fundaciones, organismos autónomos y empresas públicas de la comunidad “para adelgazarlas o suprimirlas si su existencia no se ajustase a las necesidades materiales o sociales” del Ejecutivo autónomo.

El anterior presidente, Guillermo Fernández Vara, se defendió de estas acusaciones asegurando que el consejero de Economía llamaba trampas “a su incapacidad para hacer efectivos los ingresos previstos o para recortar el gasto”. En una serie de mensajes a través de la red social Twitter, recogidos por Europa Press, el expresidente extremeño aconsejó al actual Gobierno que “busque los ingresos previstos y reduzca el gasto según el plan previsto”. Vara aseguró además que su Gobierno “redujo el gasto en 600 millones de euros” en los dos últimos años”.