Pensadores por el Movimiento 15-M
Escritores, humanistas, cineastas y sociólogos prestan su respaldo a los acampados y defienden la protesta como un “necesario toque de atención” al sistema
La oleada de protesta e indignación que se vive en la Puerta del Sol de Madrid y en otras ciudades españolas desde el pasado 15 de mayo, ha encontrado una importante fuente de apoyo en pensadores, divulgadores, escritores y cineastas, no solo de España, sino también del extranjero, que se han acercado hasta los campamentos para conocer y animar a los que con su participación se han convertido en protagonistas del denominado Movimiento15-M.
El economista y pensador José Luis Sampedro, el sociólogo Manuel Castells, el escritor uruguayo alineado con la izquierda y autor de Las venas abiertas de América Latina, Eduardo Galeano, el dibujante del diario francés Le Monde Jean Plantureux (Plantu), o el escritor y divulgador Eduard Punset son algunas de las figuras del mundo científico y cultural que han celebrado el golpe en la mesa con el que españoles y europeos han salido del conformismo y la resignación para pedir, no una solución a sus problemas, sino participar activamente en la búsqueda de esa solución.
Punset aprovechó su estancia en Oviedo como jurado del Príncipe de Asturias de Investigación Científica para visitar a los acampados en la plaza de la Escandalera de la capital asturiana. El divulgador científico matiza: “Fueron los acampados los que me invitaron a hablar con ellos. Fue más gratificante que si hubiera sido por iniciativa propia”. Galeano visitó el campamento de la Puerta del Sol y el “entusiasmo” que vio le hizo repetir la visita en la plaza de Catalunya de Barcelona. “Entusiasmo es una palabra que viene del griego y que quiere decir tener a los dioses adentro, y yo cada vez que como ahora veo ese tener a los dioses adentro me convenzo de que vivir vale la pena”, afirma el autor de El libro de los abrazos.
Sobre el origen de las protestas, Plantu acusa a la democracia española, pero también a la francesa, de “estar dormidas”. Una definición que puede equipararse a la que Punset señala como motivación de las acampadas, que en su opinión, nacen de la frustración de los ciudadanos “ante el hecho de que no salgan iniciativas desde dentro del sistema para que puedan elegir ellos mismos a sus representantes, cese la interferencia en el sistema judicial y se preserve la separación de poderes. El movimiento de los jóvenes constituye un toque de atención que no se generaba dentro del sistema”.
José Luis Sampedro fue uno de los primeros en prestar su opinión a favor de las manifestaciones de Democracia Real Ya! que el 15 de mayo se convocaron en 50 ciudades de España y que desencadenó el posterior campamento de Sol. En una entrevista el 14 de mayo, un día antes de la marcha, el economista, humanista y escritor alentaba a los jóvenes a unirse para “enderezar las cosas” y aseguraba que las batallas “se ganen o se pierdan, hay que darlas por el hecho mismo de darlas”. Punset comparte la afirmación: “Aunque la protesta sirva solo para llamar la atención sobre la situación injusta e inaceptable de la juventud habrá valido la pena”.
Este mundo está embarazado de otro mundo posible ” Eduardo Galeano
Las palabras de ánimo han sobrepasado la barrera de los creadores y pensadores españoles. El escritor y periodista uruguayo Eduardo Galeano defiende que las manifestaciones son la muestra de que “este mundo de mierda está embarazado de otro mundo posible, diferente y difícil de parir pero que ya está latiendo”. Frente a la opinión de que un mundo mejor está surgiendo, el dibujante de Le Monde destaca el movimiento como “el principio de una toma de consciencia europea”, y el cineasta iraní en el exilio Mohsen Makhmalbaf, que se paseó por Sol antes de impartir una conferencia sobre Cine y cambio social en Irán, insta a los jóvenes que están en la plaza a ser “los ojos de la democracia”.
Plantu insta a los partidos a preguntarse por qué no conectan con los jóvenes, una desconexión que tanto él como Galeano atribuyen a la burbuja en la que viven los políticos que olvidan que en Europa hay 60 millones de personas pobres. Galeano critica que en política hay muchos “redondos”, es decir personas que “no hacen más que darse vueltas” y mirarse el ombligo.
Uno de los mayores retos a los que en estos momentos se enfrentan los miembros de la protesta es dirimir de qué forma las reivindicaciones pueden saltar del papel a la realidad. Cómo mantener el espíritu de Sol cuando las lonas dejen de cubrir la plaza. En mayo de 1968 Plantu tenía 17 años pero de su experiencia en el despertar francés no saca ningún consejo esperanzador. “Muchos de mis compañeros que pedían la revolución en las manifestaciones del 68 luego han acabado siendo notarios”, afirma. Ante la misma cuestión Eduard Punset defiende “la renuncia a la violencia” y “la introducción del aprendizaje emocional en el sistema educativo”, al que responsabiliza en gran parte de la situación actual con “niveles exagerados de impotencia, desencanto y desánimo que podrían poner en peligro el equilibrio social”. Galeano rechaza preguntarse por el futuro de la protesta: “No me importa qué va a pasar, me importa lo que está pasando. Este movimiento es como el amor, infinito mientras dura”.
Las redes sociales nos hacen únicos” Eduard Punset
#acampadasol, #spanishrevolution, #tomalaplaza,#nonosvamos, #barriosdespiertos. Estos cinco términos son solo algunos de los que han utilizado miles de personas en la red social Twitter para informar y para ser informados sobre las protestas en toda España. Estas etiquetas, que han alcanzado el trending topic (lista de los 10 temas más repetidos en esa red social) nacional y en algunos casos mundial -en el caso de #spanishrevolution por ejemplo- también han servido para pedir voluntarios, unificar el mensaje de las diferentes protestas, debatir y lanzar bulos, como ocurrió con el supuesto desalojo de la acampada de Granada.
En su intervención en Oviedo, Punset señaló que las redes sociales aceleran los procesos que crean una nueva forma de pensar. El escritor y divulgador asegura que la comunidad científica acepta que el ser humano es único y diferente del resto de animales gracias a las redes sociales, y las equipara con la ruta de la seda (la ruta comercial que conectaba Europa y Asia), ya que en ellas podemos “intercambiar conocimientos, chismorreos y genes hasta generar una nueva civilización que no necesitara 2.000 años para cristalizar, sino unos pocos”.
La red, de hecho, ha servido a otros muchas figuras del mundo de la cultura para respaldar el movimiento. El director de cine Álex de la Iglesia ha utilizado una vez más su cuenta de Twitter para expresar su respaldo. “Me siento orgulloso. Siento orgullo. Creí que ya no era posible” o “Olvida Cannes, Sol es mucho más grande”.
Preguntado por los peligros que estos foros abiertos y, a veces anónimos, pueden comportar, Punset afirma: “Las redes sociales confieren un gran peso a la manada; el peligro estaba cuando ese gran peso podía ejercerlo un solo individuo”.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.