10 fotosDesarrollo sostenibleEl cultivo de soja en Argentina: un problema alemánUna muestra del camino de la soja a Europa y de la cadena de responsabilidad por el daño ambientalAnn EssweinFelie ZernackArgentina - 22 ago 2022 - 07:58CESTWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlace“El veneno está en todas partes”, dice Griselda Ruiz. La soja brota por doquier y el viento del norte lleva los pesticidas a su finca. La granjera de 60 años cree que los químicos se filtran en las aguas subterráneas y en el suelo donde crecen sus vegetales. Asegura que las vacas que bebieron del estanque contaminado murieron, y cuenta que, cuando los aviones fumigadores de cultivos truenan sobre los campos, su hijo tiene ataques de pánico.Felie ZernackHace dos décadas, la finca de Griselda Ruiz estaba rodeada de denso bosque. Ahora, su propiedad es el único punto verde en un tablero de ajedrez de campos. Monocultivo tan blanco como el ojo puede ver. Felie ZernackPara oscurecer la vista de los campos despejados, los agricultores dejan una pequeña franja de vegetación, que los residentes llaman "cortina".Felie ZernackGriselda Ruiz ha documentado los casos de contaminación en un cuaderno con la etiqueta "Respuestas". Pero las esperadas reacciones no llegan. Sus quejas hasta ahora no han traído ningún alivio. Afirma que solo una vez las autoridades han estado en su complejo tomando muestras de suelo, y que pudieron detectar residuos considerables de pesticidas en el agua potable. Los estudios más recientes sobre los efectos de estos productos en la salud son de 2009. A ella le gustaría ir de un lugar a otro y recopilar datos sobre los casos de cáncer de los residentes, dice.Felie ZernackCuando a Jorge, el esposo de Griselda Ruiz, le diagnosticaron cáncer de riñón, el médico le preguntó si vivía en una zona rural, pues lo consideraba un factor de riesgo. Un domingo, relata, habían hecho fideos caseros, pusieron la mesa y, cuando llegó el avión, lo taparon todo. Antes de que terminaran de comer, el hijo y su esposa vomitaron. "Puedes oler el veneno, está en todas partes", se queja Ruiz.Felie ZernackGriselda Ruiz cree que fueron los pesticidas en su estanque los que mataron a su ganado.Felie ZernackHéctor Capitanich cultiva soja a pocos kilómetros de la finca de Grisela Ruiz. Los pesticidas que usa están prohibidos en la UE, si bien, su utilización está permitida en Argentina."Cultivar soja es más fácil que jugar en el lodo", reza un proverbio argentino. Capitanich dice que tiene que agradecer a los pesticidas por eso. Felie Zernack3.000 camiones cargados de soja llegan todos los días al río Paraná, dice Capitanich. El suyo también. Felie ZernackLos granos se mezclan, se cargan en buques portacontenedores y se envían. Hacia dónde, reconoce Capitanich, nadie puede saberlo. Si bien, gran parte de la producción acaba en Europa para la alimentación de animales, y Alemania es el mayor productor cárnico de la UE. Felie Zernack