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Cartas a la Directora
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Junts y el acceso a la vivienda

Nuestros lectores escriben sobre el rechazo al control de alquileres, el proyecto de ley de regeneración democrática, la vida familiar y la encuesta del CIS sobre las preocupaciones de los españoles

Sindicato de Inquilinas de Barcelona manifestación
Protesta contra los altos precios de la vivienda frente a la sede de Junts, en Barcelona.Marta Pérez (EFE)

La derecha, con los votos de Junts incluidos a última hora, ha rechazado debatir en el Congreso una proposición de ley impulsada por el sindicato de inquilinas e inquilinos para controlar los alquileres temporales y por habitación. Resulta fatigoso ver el esfuerzo que dedican ciertos políticos a hablar sobre indultos, amnistía, inmigración o Venezuela y que se nieguen a hacerlo sobre uno de los problemas que más preocupa a los españoles: la carestía de la vivienda. Es obligación de los políticos de nivel nacional, autonómico y municipal buscar soluciones a corto plazo que faciliten el acceso a una vivienda digna y adecuada. La paciencia de los ciudadanos tiene un límite, y el citado sindicato ya ha advertido de que si algunos partidos no quieren siquiera debatir sobre este problema se plantean tomar otras medidas, como una huelga de alquileres.

Carlos García Aguado. Madrid

Controlar a los medios

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Viene a cuento aquello de que “piensa el ladrón que todos son de su condición”. Estos días, anda el PP machacando con que el Gobierno de Pedro Sánchez trata de colonizar los medios de comunicación. Claro. Que se lo pregunten a los profesionales de RTVE, o de Telemadrid, o en su día de Canal Nou. Ellos saben mucho de lo que hizo el PP. Ahora dice Miguel Tellado que Sánchez pretende dar carnés de periodista a quienes hablan a su favor. No, señor Tellado. Lo que el Gobierno pretende es evitar que algunos medios sean lanzaderas políticas de algunos partidos. Es una imperiosa necesidad controlar que los medios no sean propagadores de bulos. ¿Quién se opone a esto?

Julio García-Casarrubios Sainz. Ciudad Real

La buena compañía

Hoy he desayunado con mi abuelo Fernando y hemos paseado aprovechando el sol de mediodía. También ha venido su amigo Babil a casa. Viene todos los días a la misma hora. A uno nunca se le pasa la hora de venir; el otro siempre le está esperando. Las nietas de Babil son amigas mías. A veces, me preguntan: “¿De qué hablarán? Nuestro abuelo siempre quiere ir a ver al tuyo”. Yo, que alguna vez coincido en esas citas, les digo: “De todo y de nada”. No es la conversación; es la compañía. No es mucho más lo que importa. Cuidad a todas aquellas personas que os hagan sentir como cuando el sol de mediodía os calienta las mejillas. Ojalá tuvieseis un ratico para sentaros a conversar con Fernando y Babil.

Carla Pérez Soria. Caparroso (Navarra)

Las preocupaciones de los españoles

Me sorprende que la máxima preocupación de la ciudadanía española sea la inmigración y no la sanidad pública, la educación y la investigación o la violencia de género, que nos deja terribles cifras de víctimas a diario. Me sorprende que nuestra preocupación no se detenga en el precio de la vivienda, la cesta de la compra o las condiciones laborales. Me sorprende que nuestra preocupación vaya condicionada por un puñado de frases incendiarias y racistas lanzadas a traición en alguna tribuna, carentes de humanidad. Ahora dirán, frotándose las manos, que tenían razón.

Ana Belén Pérez Villa. Soria

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