Era esto
Por fin ya sabemos qué es el diálogo y cómo consigue arreglar cualquier conflicto

Durante años oímos la misma canción: “Esto solo se arregla con diálogo”. En el País Vasco, cuando morían españoles todas las semanas, en Cataluña cuando los niños no podían estudiar en castellano, en Londres, París o Madrid cuando un atentado demencial asesinaba a docenas de inocentes… ”Hace falta diálogo, más diálogo, ¡diálogo entre civilizaciones!” (siempre hay uno más bobo o más caradura que hace subir la apuesta). ¿Pero no están para eso los parlamentos? No, demasiados formulismos, hace falta más diálogo. ¿Y los encuentros entre educadores, empresarios, profesionales, líderes religiosos, debates en medios de comunicación, cine, arte, conciertos multiétnicos…? No, son paños calientes, distracciones que apartan de lo esencial, lo que necesitamos es diálogo verdadero, diálogo de pura cepa, diálogo en vena. O si no tendremos conflicto sin remedio, enfrentamiento, guerra a muerte. Y uno, desesperado, se preguntaba qué sería esa pócima curalotodo del diálogo, cómo se lograría que funcionase para resolver de una vez lo que parecía irresoluble.
Por fin lo hemos descubierto: ya sabemos qué es el diálogo y cómo consigue arreglar cualquier conflicto. Ante todo, es imprescindible desentenderse de lo verdadero o lo falso, lo legal o lo ilegal, lo justo o lo injusto del asunto que discutimos con nuestro adversario. Lo único que importa es, primero, qué deseamos obtener de este y, segundo, qué podemos dar para sobornarle. Si nuestro rival quiere grandes beneficios, lo mejor es ofrecerle todo y más, pero no de nuestro peculio, sino del de otros. Negocio perfecto: obtenemos de él lo que nos interesa privadamente y se lo cambiamos por valores públicos que no nos interesan, porque son de cualquiera. Después, hay que hacer un poco de magia potagia para digerir el cambalache (no es la Constitución la que se pliega al rebelde, sino el rebelde quien se pliega a la Constitución) y viva el diálogo.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Más información
Archivado En
Últimas noticias
Estados Unidos intercepta un nuevo petrolero frente a las costas de Venezuela
Las entidades de Badalona se arremangan y habilitan dos espacios para acoger a migrantes del B9
Villarreal - FC Barcelona en directo | Los azulgrana buscan acabar el año con una victoria ante el tercer clasificado
El Barça de Punter vence al Joventut (90-80) en el regreso de Ricky Rubio al Palau
Lo más visto
- Uno de los promotores de la señal V-16 de tráfico: “Es duro oír el testimonio de víctimas que han sufrido amputaciones al poner los triángulos”
- Manuel Bustos acepta seis meses de cárcel por cargar gastos privados a la Federación de Municipios
- Los jueces del Tribunal Penal Internacional se rebelan ante las sanciones de Trump: “No hay que ceder”
- Tráfico alerta de fuertes nevadas a partir de mañana en plena Operación Navidad
- Más de 40 congresistas demócratas piden por carta a Trump que cese en sus “intentos de socavar la democracia en Brasil”






























































