Rompeolas de todas las Europas
Los lectores escriben sobre el resultado del partido de ultraderecha en las elecciones del 23-J, la petición de Feijóo a Sánchez para que le permita gobernar, el empleo de los jóvenes y la sociedad insensible
Tras leer el artículo de Fernando Vallespín y la carta a la directora de Elena Martínez del domingo sigo creyendo que, si hubo un tiempo en el que Madrid fue el rompeolas de todas las Españas, hoy podríamos decir que España es el rompeolas de todas las Europas. Nuestro último proceso electoral es el único en el que la ultraderecha ni se ha reforzado ni ha crecido ni se ha convertido en algo más que un incómodo socio necesario. Quizá los españoles y las españolas no somos tan inmaduros, democráticamente hablando. Parece que tenemos memoria hacia atrás y que, pese a todo, la mayoría apostamos por la tolerancia, la convivencia y el progreso, que no admitimos mensajes denigrantes y ultrajantes para las mujeres, los inmigrantes, el colectivo LGTBI o la cultura. El mapa electoral es el que es: diverso, plural y hasta contradictorio, es decir, lo propio de una democracia profunda y auténtica. Con esos mimbres, que la política haga su trabajo: los electores y las electoras hemos hecho el nuestro.
Luis Andrés Muñiz García. Alicante
Otro nivel
Pero vamos a ver, señor Feijóo, ¿en qué mundo vive? Se ha pasado todo el tiempo desde que es usted presidente del Partido Popular pidiendo gobernar para derogar el sanchismo. Iba a derogar todas las leyes que se habían aprobado en esta legislatura. El mensaje tiene muy poco de moderado. El mensaje tiene muy poco fundamento; de hecho, ya había reconocido que algunas no las iba a derogar. Pero sobre todo el mensaje es una incongruencia, por no emplear otro término menos moderado. Ahora le pide usted al sanchismo que lo apoye para poder gobernar. Le pide usted al sanchismo apoyo para derogar el sanchismo. Se le esperaba otro nivel.
Julio García-Casarrubios Sainz. Valdepeñas (Ciudad Real)
Empleo y jóvenes
Recientemente hemos conocido los buenos resultados de empleo, pensamos en futuro pleno empleo, abordar el paro juvenil con medidas como el estatuto del becario. En lo que se refiere al empleo juvenil, ¿llegamos a todo? ¿Las becas que conceden fundaciones públicas se ven afectadas por el futuro estatuto del becario? Pienso en la Fundación SEPI. Algunas empresas que participan son privadas, se firman convenios, estos incluyen los criterios de búsqueda de becarios. ¿Una nueva forma de reclutar? El becario puede quedarse, ¿y si no se queda?, ¿por qué motivo? ¿Lo has tenido un año en la empresa para qué? ¿Estaría bien visto optar a uno nuevo? ¿Es justo?
Gloria López. Madrid
Insensibles
Vivimos con una ansiedad constante. Estresados por cosas que realmente no importan. Nos preocupamos más de la ruptura de Rosalía, que del dolor de un amigo. Nos estamos volviendo tolerantes a la tristeza. Seres inertes, insensibles, autómatas en un mundo que estamos destruyendo y que nos está destrozando al tiempo. Aprendemos por imitación y hemos copiado el comportamiento de las máquinas, pero solo su parte deshumanizada. Debemos recordar lo que era escuchar, mantener la mirada mientras nos hablan, dar cobijo a un amigo cuando está en el abismo y, sobre todo, mirar de nuevo este mundo con humanidad y esperanza.
Carla Belda Rubio. Valencia
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