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Columna
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Nicaragua

La escritora responde al Gobierno de Daniel Ortega y le dice a su país: “te arropo y te tapo los ojos / para que no veas los verdugos que llegan a cortarte la cabeza”

Una nicaragüense que vive exiliada en Costa Rica sostiene una bandera nacional contra su pecho.
Una nicaragüense que vive exiliada en Costa Rica sostiene una bandera nacional contra su pecho.OSCAR NAVARRETE (AFP)
Gioconda Belli

Tantas veces me he propuesto olvidarte

como si fueras un amante cruel de esos que le cierran a uno

la puerta en las narices

o uno de aquellos que cuanto más se aman

más olvido prodigan

pero nada de lo que hago lo consigue

viene el verdor la lluvia el viento

el revoloteo de los papeles en las calles

el roble derramando sus flores como cáscaras de seda en las aceras

el rostro del chavalo con el trapo

su sonrisa que cruza y trasciende la pobreza

viene el atardecer sobre el perfil puntiagudo del volcán a lo lejos

las nubes derramando pintura roja y púrpura sobre el cielo

el hablar deslenguado rápido juguetón de la gente

y todo lo que maldigo y desdigo de vos se me deshace

y me irrumpe el amor como si me corrieran caballos en el pecho

y te contemplo atravesada de ceibos y corteses

de madroños caobas y palmeras

y te amo patria de mis sueños y mis penas

y te llevo conmigo para lavarte las manchas en secreto

susurrarte esperanzas

y prometerte curas y encantos que te salven.

Palabras digo puesto que son ellas la argamasa de mi vida

y a punta de palabras te imagino una y otra vez renacida

genial, despojada de cuanta polilla te corroe día a día los

cimientos.

Arranco de tu pelo a los que te venden te roban y te abusan

te cuento cuentos en la esquina de mi almohada

te arropo y te tapo los ojos

para que no veas los verdugos que llegan a cortarte la cabeza.

Tierra

Paisaje

Yo moriré

Morirán mis angustias

pero vos seguirás

anclada en el mismo lugar

acurrucando mis memorias

y mis huesos.

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