Consejos para ahorrar en familia en la vuelta al cole: no caer en gastos hormiga y comparar precios
La inversión para iniciar el curso será la más cara de la historia, 410,71 euros de media por alumno. Hacer listas con lo que se tiene y lo que se necesita, escalonar las compras e involucrar a los niños en la economía familiar pueden hacer más llevadera la cuesta de septiembre
La vuelta al cole supone para muchas familias el momento de sacar la calculadora y volver a hacer números tras las vacaciones de verano. Uniformes, libros de texto, material escolar, actividades extracurriculares… “Un gasto extra que se podría llevar mejor si se anticipara”, reflexiona en conversación telefónica Amalia Guerrero, economista y autora del libro En casa las cuentas claras (Plataforma Actual). Pero como en la economía familiar no siempre se puede tener todo preparado o los números no salen como se había planeado, los expertos dan algunos consejos de última hora para no gastar de más en la cuesta de septiembre.
Según publica en su web el comparador financiero Banqmi, este 2023 la vuelta al cole será la más cara de la historia, con 410,71 euros de media por alumno. Aunque la subida con respecto a los años anteriores es la más baja, de solo un 1,39%, prosiguen en sus datos. Guerrero considera que este dato sumado al aumento de la cesta de la compra hace más complicada esta cuesta de septiembre para las familias. “Lo primero es hacer una lista de todo el material escolar que todavía se puede usar”, explica. Eso ayuda a saber con qué cuentan los niños para comenzar las clases y qué es lo que verdaderamente necesitan nuevo. En el caso de tener que ir a comprar una mochila, por ejemplo, “elaborar en familia un presupuesto para ver cuánto se puede gastar”, puntualiza Sonia Martínez Lomas, psicóloga y directora de los centros Crece Bien, en Madrid.
Respecto al material escolar (estuches, cuadernos o pinturas), la economista recuerda que es importante comparar entre distintos productos y establecimientos: “No quedarnos con lo primero que veamos”. Martínez, por su parte, recomienda ir a comprar con los niños el material que sea necesario porque cuando lo hacen ellos le dan valor y se comprometen más con su cuidado. Algo en lo que no está de acuerdo Guerrero, pues considera que si el menor suele inclinarse hacia los productos más caros, “es mejor que no vaya a comprar”. Y puntualiza: “Si quieres ahorrar tienes que adquirir lo que hace falta”.
En cuanto a ahorrar en los gastos de ropa, Guerrero sugiere no caer en la tentación de las primeras ofertas que vean los padres y madres porque ahora, por ejemplo, no son necesarios ni el abrigo ni las botas de agua. Según sugiere, primero se debe mirar con qué ropa de invierno cuenta el menor y, una vez visto lo que necesita, “lo mejor es comprarla en otro momento, de manera escalonada en los próximos meses”. De nuevo, insiste Guerrero, hacer una lista, comprobar qué necesitan realmente y no caer en los gastos hormiga, que son esos gastos que la experta define como dinero que se gasta por impulso, sin darse cuenta y por donde se suele escapar parte del ahorro. Respecto a los uniformes, la economista explica que es importante aprovechar los de otros años, comprar de marca blanca y serigrafiarlos, adquirirlos de segunda mano o incluso hay colegios que permiten pagarlos en varios meses a coste cero: “Opciones necesarias para ahorrar, porque el gasto de la vuelta al cole es una vez al año, pero en comer las familias gastan dinero todas las semanas”. Según los últimos datos que ofrece el Instituto Nacional de Estadísticas sobre el Índice de Precios de Consumo (IPC), el calzado y la ropa infantil han experimentado un aumento anual de un 2,6% y un 1,2%, respectivamente. Por lo que tanto si se usa uniforme como si no, vestir a los niños este nuevo curso sale también más caro.
Mirar la letra pequeña y comparar
Algo parecido sucede con los libros de texto. Según la Federación de Asociaciones de Consumidores y Usuarios de Andalucía (Facua), las familias tienen completa libertad para elegir dónde comprar los libros, no están obligados a adquirirlos donde el centro educativo les diga. Además, recomiendan no guiarse por las ofertas y “leer bien todas las condiciones que aplican, insertas en muchos casos en la letra pequeña de dichas ofertas”. Por su parte, Guerrero prefiere optar por la opción de adquirirlos de segunda mano.
En las actividades extraescolares también viene bien reflexionar sobre si son realmente necesarias y, en el caso de que hagan falta esas horas extras, optar por la opción más económica. “No es lo mismo apuntarlo en una academia o en la asociación de tu barrio o en el colegio”, según Guerrero. “Siempre hay que explicar la economía a los niños como motivación”, asegura. Esto quiere decir que es bueno hablar con ellos y hacerles partícipes del gasto familiar que supone la vuelta al cole: “Enseñarles que cuidar el material para volver a utilizarlo y no comprar cada año una mochila nueva les reporta un beneficio porque se puede ahorrar y gastar ese dinero en una actividad que disfrutemos en familia”. Para la experta, hacer esto ayudará a los hijos a afrontar mejor y en familia este nuevo curso escolar.
Diez recomendaciones para no gastar de más con la vuelta al cole
- Hacer una lista con el material que todavía se puede usar y otra con el que hay que comprar para el nuevo curso.
- Elaborar un presupuesto en familia para el material que hay que adquirir.
- Comparar precios en distintos establecimientos.
- No caer en las ofertas y comprobar antes qué ropa necesitan los niños para el invierno. No derrochar en los gastos hormiga, ese dinero que se gasta a menudo por impulso.
- Comprar de manera escalonada en distintos meses.
- Utilizar uniformes heredados o de segunda mano. Si es necesario comprar uno nuevo, ver si existe la opción de pagarlo en varios meses a coste cero.
- Valorar dónde es mejor adquirir los libros de texto y mirar la letra pequeña de las condiciones de las ofertas.
- Hablar con los hijos del gasto que supone la vuelta al cole y hacerles partícipes del proceso de compra y preparación del material para que le den valor.
- Explicarles a los niños que hay que cuidar el material para no tener que comprarlo el año que viene. Ese ahorro se puede invertir en una actividad de ocio familiar.
- Ahorrar durante todo el año para el gasto extra que supone la vuelta al cole y elaborar una lista a final de cada curso con el material que se puede volver a utilizar.
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